Nueve mujeres encarceladas por distintos motivos (robo, prostitución, adulterio, delito político...) malviven en una prisión situada en un punto inconcreto de la España posterior a la guerra civil (entre los años 40 y 50) pasando frío, hambre y sin apenas atención médica. Las reclusas son atendidas por monjas y la prisión está administrada por Don Mauro, el director. La vida en la cárcel está alterada por la próxima celebración del jubileo de San Perpetuo, por el cual, cada diez años, el obispo concede el indulto a una de las presas.

Ese es el argumento de Presas, el primer montaje del Aula de Teatro Amateur para adultos de la Escuela de artes escénicas del Teatro de las Esquinas, que se estrena en la sala (hoy y mañana, 20.30 horas, entradas a 5 euros).

Presas, un texto de Verónica Fernández e Ignacio del Moral dirigido por Rosa Lasierra, retrata el dolor, la amargura y la sinrazón que soportaron las mujeres recluidas en las cárceles de Franco. Al igual que los hombres, las mujeres sufrían las mismas calamidades, además de sufrir torturas específicas derivadas de su condición de mujer (violaciones, chantaje emocional…). Pequeños campos de concentración dirigidos, con mano de hierro, por una Iglesia represora, cómplice del régimen franquista.

La obra, que se estrena este fin de semana, se ha planteado con el propósito de que tenga un recorrido en circuitos de teatro amateur, festivales y certámenes afines.