Los Mossos d’Esquadra detuvieron ayer por desobediencia y desórdenes públicos a un hombre que supuestamente causó varios incidentes en los últimos días en Tarragona, donde las fuerzas de seguridad incluso habían activado una alerta por sus consignas islamistas y su conducta imprevisible. El arrestado fue trasladado a comisaría después de que la policía autonómica le localizara en un área de servicio de la AP-7 en Hospitalet del Infante dando trompos con su vehículo, ante lo que varios testigos llamaron a los Mossos para denunciar su conducta temeraria. También se le atribuyen pintadas en un hotel de La Pineda.
Los servicios de inteligencia habían advertido en las últimas horas a la Policía Nacional, la Guardia Civil y a los Mossos de la radicalidad de este hombre, al que se había visto por última vez en Salou con una conducta «irregular», con «soflamas islamistas» y que se dirigió a una comisaría de la policía catalana, según detalló ayer el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Ante esta situación, los Mossos habían advertido a sus dotaciones y comisarías alertando de que esta persona realizaba consignas islamistas y tenía una conducta imprevisible, ante lo que se instaba a reforzar la seguridad en las comisarías y la alerta de las unidades que patrullan por la calle. El hombre, K. M., de 29 años y holandesa, fue visto por última vez en Salou a las 15.00 horas del pasado domingo.
