Sin respuesta. Así quedó ayer la propuesta formal del presidente del Gobierno para que el PP firme un pacto de Estado sobre inmigración. Zapatero ofreció en primer lugar a Rajoy un "pacto nacional", que deberá ser consensuado después con todos los partidos y las fuerzas sociales.

El secretario general del PP ni aceptó ni rechazó la idea, según explicó posteriormente la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega. El propio Rajoy no pudo ser preguntado por la cuestión, porque ni siquiera la expuso ante los periodistas como uno de los temas abordados en la entrevista que mantuvo con el presidente.

De la Vega reconoció que el Gobierno "no puede asumir el reto de la inmigración en solitario", y recordó para probarlo los "sucesivos fracasos" de las reformas migratorias planteadas por el Gobierno del PP. Sin embargo, la vicepresidenta desvinculó el posible pacto de Estado de la primera legislación migratoria que prepara el Ejecutivo de Zapatero.