Mariano Rajoy animó ayer a los empresarios de América del Sur a volver a invertir en España, que está creciendo "más que nadie en la zona euro" y "volverá a hacerlo otra vez el año que viene", auguró el jefe del Ejecutivo. "España vuelve a ser un magnífico país de oportunidades para invertir y les animo a todos a que lo hagan", les dijo a los altos ejecutivos que participaron en un foro empresarial que se ha celebrado en paralelo a la cumbre iberoamericana de Veracruz (México), que empieza hoy.

Rajoy se erigió en un ejemplo a seguir por los gobiernos de la región suramericana que están sufriendo un parón económico que la mayoría de los expertos achacan a la falta de reformas estructurales. El jefe del Ejecutivo les repitió la "evolución" que ha experimentado desde que está en la Moncloa, un relato que ha repetido en muchas ocasiones. "En 2012, se debatía cuándo iba a pedir el rescate España y ahora, en el G-20 de Brisbane, me pidieron que iniciara las intervenciones para explicar cómo las reformas pueden llevar al crecimiento", explicó.

NI UNA MENCIÓN AL PARO Sin citar en ningún momento que España sufre una tasa de desempleo de casi el 24%, Rajoy les dio su receta para salir de la crisis: "Controlar el déficit público, la deuda y hacer la economía más liberal y más flexible".

Frente a las previsiones del Fondo Monetario Internacional y la Comisión Europea, que señalan que España crecerá en el 2015 un 1,7%, Mariano Rajoy destacó que su Gobierno calcula un 2% aunque cree que, si se mantiene el tipo de cambio del euro y el precio de las materias primas, la economía "puede crecer más del 2%".

Hacia el final de su discurso, ante un auditorio en la que la mayoría de los empresarios eran hombres e iban vestidos con guayabera, el jefe del Ejecutivo, de traje y corbata, señaló que su Gobierno se va a volcar en tres "retos": el crédito, la educación y la innovación, mientras se sigue con las reformas estructurales.

Felipe VI que, como Rajoy, hoy asistirá a la inauguración de la cumbre iberoamericana, ayer también realizó varios actos, entre otros, visitó el Círculo Español de Veracruz, fundado hace 150 años. Allí aprovechó para homenajear al emigrante "universal", el que se separa de sus "raíces y seres queridos" en busca de nuevas oportunidades, algo que hicieron miles de españoles tras la guerra civil en este país centroamericano. Un éxodo forzoso por razones políticas que en los últimos años se está repitiendo pero por motivos económicos. "Merecen todo el respeto, admiración y aprecio", añadió el Monarca.

SIN LA REINA LETIZIA Felipe VI ha viajado a México sin la reina Letizia, ya que en la cumbre iberoamericana no hay programa para primeras damas, pero "le habría gustado venir", confesó el Rey a unos periodistas españoles. Eso sí, en su intervención, bromeó al asegurar que se sentía "muy bien acompañado" por su familia, su bisabuelo Alfonso XIII, su bisabuela, la Reina Victoria Eugenia, e Isabel II, cuyos retratos cuelgan de las paredes de la sala de exposiciones que ayer visitó el Monarca español.

El de ayer fue el primer discurso de los tres que Felipe VI tiene previsto pronunciar en Veracruz estos días.