Los vocales de la minoría progresista del CGPJ no han logrado colocar a ninguno de sus cuatro candidatos en la sala segunda del Tribunal Supremo, la más importante de este tribunal, ya que se dedica a tramitar los procesos penales que afectan al Gobierno y parlamentarios. La relación de fuerzas que existe en esa sala está distribuida entre cinco conservadores, tres progresistas, cinco no afiliados y dos moderados.