El exsocio de Iñaki Urdangarin al frente del Instituto Nóos, Diego Torres, se opone a que le impute por blanqueo de capitales en el 'caso Nóos' y hace extensiva su oposición para su esposa, Ana María Tejeiro, y para Urdangarin. La defensa de Torres se ha adelantado al plazo de 10 días dado por el juez para responder a la solicitud de la acusación popular de Manos Limpias, que vence el 6 de marzo.

En caso de que el juez instructor del caso, José Castro, acepte la petición del sindicato y decida imputar por blanqueo a Urdangarin, Torres y Tejeiro, los tres tendrían que volver a declarar ante Castro. Con esta petición, Manos Limpias pretende reforzar la acusación por blanqueo por la que está imputada la infanta Cristina pero no su marido, ni el matrimonio Torres-Tejeiro. Si ellos no fueran imputados por blanqueo, podría decaer la acusación de la hija del Rey. Torres ha entregado al juez un escrito con hasta 71 argumentos en contra de la imputación de su esposa, en el que comparar la actuación de la infanta con la de Tejeiro.

Por otra parte, Torres insiste en pedir que el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón declare como testigo en el 'caso Noos'. El juez José Castro rechazó esta solicitud en un auto recurrido por Torres, quien pretende que Gallardón declare sobre la bondad de los contratos suscritos entre la candidatura olímpica de Madrid-16 y una fundación del entramado Nóos durante su etapa como alcalde de Madrid que supusieron un desembolso público de 144.000 euros para las arcas públicas.

Castro ha dado este martes traslado del recurso a la Audiencia Provincial de Palma, que también deberá resolver si el Frente Cívico, la entidad de Julio Anguita, puede tener voz propia como acusación popular, como mantuvo Castro, o debe sumarse a la representación de Manos Limpias como propugna el sindicato y la Fiscalía Anticorrupción.