David Dobrik es uno de los 'influencers' más conocidos del mundo. Con tan solo 17 años se convirtió en una estrella en Vine, la app que popularizó los vídeos cortos antes que TikTok, y con 22 ya era una de las principales celebridades de Youtube, donde acumula más de 18 millones de suscriptores. Junto a su grupo de amigos, conocidos como Vlog Squad, Dobrik cimentó su éxito viral con vídeos basados en bromas alocadas y divertidos encuentros con famosos.

Sin embargo, en los últimos días su nombre ha estado ligado a un escándalo de abuso sexual que está haciendo tambalear su imperio. El pasado martes, Insider publicó una investigación en la que una joven acusaba a Dom Zeglaitis, miembro de ese grupo de amigos y más conocido por el apodo Durte Dom, de haberla violado y a Dobrik de haber estado presente durante el momento del presunto abuso.

El encuentro de produjo en 2018. Dobrik colgó entonces un vídeo en su canal titulado 'She should not have played with fire' (Ella no debería haber jugado con fuego, en inglés) en el que los chicos de la Vlog Squad charlaban, bebían y hacían bromas sexuales con un grupo de chicas. En el vídeo, Zeglaitis explica que terminó practicando sexo con una de ellas. Esa chica aseguró a Insider que los 'influencers' les compraron alcohol de alta graduación que no podían comprar por ser menores y que después fue violada, pues iba demasiado borracha como para dar su consentimiento. Otra chica presente en esa fiesta confirmó esa versión.

En el vídeo, Dobrik y tres de sus colegas, Todd Smith, Nick Antonian y Brandon Calvillo, reían comentando a cámara que habían estado presentes en el trío que había logrado realizar Zeglaitis durante esa noche. "Iremos a la cárcel", bromearon entre carcajadas. El vídeo acumuló más de cinco millones de visualizaciones en Youtube antes de que lo retiraran a petición de la chica. De momento no se han presentado cargos ni se ha avisado a la policía de lo denunciado en el artículo.

Terremoto viral

La publicación de ese testimonio no tardó en convertirse en un terremoto viral. Miles de personas se lanzaron a las redes sociales para comentar la información publicada. Tras rechazar hablar con el medio detrás de la investigación, Dobrik publicó un vídeo en el que aseguraba haberse distanciado de Zeglaitis tras sentirse "decepcionado" por algunos de sus amigos y remarcando que "no apoyo ninguna mala conducta". Sin embargo, publicó esas disculpas en un canal secundario en el que tiene 'solo' 1,69 millones de seguidores.

El pasado abril Dobrik dejó de colgar vídeos en su canal de Youtube para dedicarse plenamente a Dispo, una emergente aplicación de fotografías que funciona como una antigua cámara desechable y con la que quiere competir con Instagram. En los últimos meses, su plataforma ha logrado recibir millones en inversión de varios fondos y el interés de sus fans.

Pérdida de fans

Sin embargo, tras destaparse el escándalo el imperio Dobrik se tambalea. Miles de usuarios han criticado a la estrella de la generación Z con comentarios negativos sobre Dispo en la tienda digital de Apple, donde cuenta con menos de dos estrellas de valoración. El 'youtuber' a quien habían comparado con el presentador Jimmy Fallon anunció este domingo que dimitía de la directiva de la aplicación para no perjudicar más su crecimiento. Muchos otros fans decidieron dejar de estar suscritos a su canal de Youtube, que la semana pasada perdió más de 100.000 seguidores. Sólo el viernes sus vídeos perdieron un acumulado de 66 millones de visualizaciones.

Y detrás de los fans van las marcas. El escándalo ha causado una crisis reputacional que ahora amenaza con dañar severamente el bolsillo de Dobrik. Dos de los principales fondos que habían invertido en Dispo, Spark Capital y 776, se han distanciado de su fundador. Varias de las marcas que patrocinan sus vídeos y su podcast han anunciado que han rescindido sus acuerdos de colaboración con Dobrik o que están en proceso de evaluación.

Otras polémicas

El mes pasado, otro antiguo miembro de la Vlog Squad, Joseth Francois, aseguró haber sido "sexualmente agredido" tras ser engañado en un vídeo para que besase a otro 'youtuber' pensando que era una mujer. En su vídeo, Dobrik le pide perdón, aunque no menciona directamente a la chica que ha denunciado haber sido violada. El escándalo ha hecho que se revalúe la actitud de este grupo de estrellas de Internet, a quienes también se achacan bromas racistas.

El caso no parece que vaya a frenar, pues son múltiples los 'influencers' acusados por presunta acción directa o por connivencia. Uno de ellos, Jeff Wittek, criticó en su podcast a Kat Tenbarga, la reportera detrás de la investigación, para mandar a sus fans a acosarla. La periodista denunció haber recibido amenazas de muerte y cientos de comentarios de odio. Después, Wittek le pidió disculpas.

La pérdida de apoyos de Dobrik y sus amigos puede suponer la primera caída de los altares de uno de los grandes titanes del ecosistema 'influencer'.