La Administración de George Bush prepara una ambiciosa iniciativa destinada a promocionar la democracia en el "Gran Oriente Próximo", que seguirá el modelo de los Acuerdos de Helsinki de 1975, que promovieron las libertades en la desaparecida URSS y en sus satélites europeos, según reveló ayer The Washington Post .

Esta iniciativa, que será anunciada por el presidente Bush el próximo junio durante una cumbre del Grupo de los Siete (EEUU, Francia, Gran Bretaña, Italia, Alemania, Canadá y Japón), se basa en que los países árabes y del sur de Asia se comprometan a efectuar drásticas reformas políticas, económicas y sociales, además de respetar los derechos humanos.

Como contrapartida, explica el diario citando fuentes europeas y estadounidenses, esos mismos países recibirán más ayuda procedente de Occidente en numerosos campos, incluyendo apoyo para ingresar en la Organización Mundial del Comercio y para participar de manera más activa en la política internacional.

"Supone un cambio drástico de la forma en que nos enfrentamos al conflicto de Oriente Próximo", explicó un alto funcionario del Departamento de Estado estadounidense, que ya se ha puesto en contacto con los aliados europeos con el objetivo de recabar apoyo suficiente para esta iniciativa, cuyos detalles no se han hecho públicos todavía.