El escándalo de la relación del presidente de Francia, François Hollande, y la actriz Julie Gayet amenaza con ir a más. Según publica este lunes Mediapart, el apartamento que utilizó el jefe del Elíseo para sus encuentros secretos con Gayet es propiedad de Michel Ferracci, sospechoso de tener relaciones con la mafia corsa. El piso se lo habría cedido a la pareja la actriz Emmanuel Hauck, exesposa de Ferraci y compañera de François Masini, asesinado el pasado mayo en Córcega.
Si se confirma este extremo, el escándalo, más alla de las repercusiones en la imagen de Hollande o en la salud de su pareja, Valérie Trierweiler, hospitalizada con una depresión tras tener conocimiento del romance, tendría ya carácter político.
El pasado noviembre Ferracci fue condenado a 18 meses de cárcel por su participación en un caso de extorsión de fondos, realizados en un "círculo" de juego parisino, la sala Wagram, por cuenta de una banda de mafiosos corsos.
