Boquiñeni se llenó de actividades culturales en el mes de diciembre para finalizar el proyecto de Igualdad en el Mundo Rural financiado por la Diputación de Zaragoza.

Por un lado, el 5 de diciembre hubo un cinefórum para mayores de 16 años en el que se proyectó la película No estás sola, Sara y en la que se trata el tema del maltrato. Tras su visionado se desarrolló un debate entre todos los asistentes sobre la película y la problemática actual que nos rodea.

Previo a los excesos navideños, el 12 de diciembre se organizó un taller de alimentación saludable para la promoción de la comida sana y la prevención de la obesidad y otras patologías alimentarias como la bulimia y la anorexia. El objetivo principal de esta actividad era crear hábitos saludables y mejorar los hábitos alimentarios.

El día 19 llegó el turno de Los cuentos de Cachito, un divertido espectáculo sobre la igualdad de género. Cachito es un niño grande que vino a contar historias desde la sencillez, historias divertidas y participativas en las que los niños fueron los principales protagonistas. Historias que nos invitan a reflexionar, pensar y nos muestran otra manera de ver las cosas.

También ese fin de semana se realizó un taller de defensa personal. Esta actividad fue impartida por profesionales en la materia que enseñaron cosas básicas sobre cómo reaccionar ante una situación de ataque. Aprender defensa personal tiene numerosas ventajas no solo para defendernos, sino que también otorga confianza en uno mismo y ayuda a liberar el estrés y la tensión.

Y para finalizar con el proyecto, el día 26 volvió Cachito, y tanto había gustado que en un solo día se completó el aforo máximo permitido. Esta vez, Cachito realizó un espectáculo de magia payasa y científica, con el que a través de la ciencia y la magia se fomentó el respeto y la igualdad de género, enseñando a querernos tal y como somos. Cachito ayudó a entender gracias a la ciencia y la magia que la fuerza y el poder también reside en las pequeñas cosas.

ADAPTÁNDOSE A LA SITUACIÓN

Desde la Concejalía de Cultura de Boquiñeni señalan que en los tiempos que corren no ha sido fácil gestionar ni organizar las actividades culturales. «El día que se decretó el confinamiento se paralizó todo, pero hubo un día que tuvimos que volver a trabajar y pensar como realizar nuevas actividades, adecuándonos en todo momento a la normativa vigente. Siempre hemos sentido que con medidas como la utilización desinfectante, limitación de aforos, cumplimiento de la distancia de seguridad y uso de la mascarilla se pueden realizar actividades con total seguridad, porque la cultura también cura». Desde la concejalía desean un Feliz Año Nuevo y que 2021 traiga salud. T