Brujas, fantasmas, personajes de películas de terror y otros extraños personajes llenaron las calles de San Mateo por una noche, la de Halloween. Todo porque el ayuntamiento de la localidad organizó una entretenida velada para celebrar esta mágica fecha.

Todo comenzó al caer la noche en la calle Torres, situada junto al edificio consistorial, donde se instaló una cuidada reproducción de la puerta de un castillo. Además, la vía se llenó de velas y otros elementos fantasmagóricos que hicieron las delicias de los numerosos niños que, disfrazados para la ocasión, acudieron a la fiesta. Muchos de ellos, protagonizaron divertidas situaciones, ya que se dedicaron a asustar a algunos de los sanmateanos que pasaban por las calles próximas.

Otro de los atractivos de la velada fue el cuento en la "Casa de la Bruja", una vivienda particular -concretamente la de la concejal de Cultura del consistorio sanmateano, María Angeles Naval- que se habilitó para tal efecto.

Tras la animación callejera, chocolatada para todos los asistentes y, luego, baile en la discoteca. Aunque, en esta propuesta cambiaron los protagonistas, puesto que acudieron muchas personas mayores que mantuvieron el espíritu de "la noche de las almas" hasta bien entrada la madrugada.

Además de estas iniciativas, en la biblioteca de San Mateo también se celebró Halloween con una divertida actividad que bajo el lema "Cuentos de Ogros y Brujas", permitió a los pequeños lectores descubrir el mundo de estos personajillos.

La jornada contó con la participación del grupo cultural "El Globo", quien recitó entretenidas historias sobre la magia y el miedo, las hadas, las brujas y los fantasmas. Una iniciativa que, más que asustar a los asistentes produjo risas y alguna que otra sorpresa, a juzgar por las caritas de los niños y niñas asistentes.

NURIA ASIN