El 29 de mayo, se reunieron en la sede comarcal los alcaldes de toda la comarca para evaluar la situación actual, analizando las problemáticas municipales en relación al covid-19 y acordaron la cancelación de las fiestas patronales durante los meses de junio, julio y agosto, sin perjuicio de poder llevar a cabo actos esporádicos en los que se observen las pautas sanitarias fijadas por el Gobierno de la Nación. Esta cancelación incluye cualquier actividad que puedan realizar las peñas.

En cuanto a las piscinas públicas, se recomendó la no apertura hasta julio, aunque en este caso cada municipio actuará según su criterio respetando las normativas sanitarias en vigor.

Las escuelas municipales infantiles permanecerán cerradas, como mínimo hasta septiembre, y el Gobierno de Aragón dictará la orden que lo regule.

Y en relación a las actividades de tiempo libre programadas por los ayuntamientos, el Gobierno de Aragón se compromete a estudiarlo y a elaborar las recomendaciones precisas para poder proceder a la realización de las mismas.

Los alcaldes también mostraron su preocupación por el cumplimiento de las medidas de protección y acordaron realizar reuniones de seguimiento periódicas por tratarse de una situación cambiante y cuyas recomendaciones pueden variar. T