Las navidades en Mallén estuvieron llenas de actividades de muy diversa índole. Por un lado, el 21 de diciembre, el equipo Mushing llegó a la plaza de España de Mallén y allí les estaba esperando muchos escolares del colegio público Manlia y numerosos vecinos que acudieron para disfrutar de la belleza e inteligencia de estos animales. Todos fueron testigos de la entrega de la Bandera Verde.

Al día siguiente, el coro parroquial de Mallén salió de ronda interpretando diversos villancicos tradicionales y más actuales. Partió desde la plaza de España y recorrió las principales calles del municipio. Una de sus paradas tuvo lugar en la residencia de ancianos San Sebastián, donde animaron y dieron calidez a la tarde de los residentes.

Tampoco la Escuela de Jota de Mallén no faltó a la cita y ofreció un entrañable festival de jota. El domingo 23 volvieron a emocionar y dibujar una sonrisa en el rostro a todos los asistentes. Al día siguiente y siguiendo la tradición, los miembros de la escuela fueron los encargados de llevar la alegría a la residencia en una de las visitas más esperadas de esos días.

También la Banda de la Agrupación Musical Santa Cecilia salió de ronda. Lo hizo el sábado 29, amenizando con una gran banda sonora las últimas compras del año en Mallén. Fue un día muy especial, ya que para algunos de los músicos era su debut en público. Tras animar las calles más céntricas de la población se trasladaron a la residencia de ancianos, donde ofrecieron un bonito repertorio a los residentes.

El final de año llegó con el espectáculo El verdadero final de la bella durmiente, por parte de la compañía Peliagudo Arte y Circo en la Casa de Cultura, una actividad financiada por la Comarca Campo de Borja; y la tradicional carrera de San Silvestre.

CABALGATA DE REYES

Los Reyes Magos no faltaron a su habitual cita con los niños de Mallén el 5 de enero. Tras ser recibidos por las autoridades locales en el ayuntamiento, Melchor, Gaspar y Baltasar subieron al balcón para saludar desde allí a los vecinos que se concentraron en la plaza España. Después se desplazaron al pabellón centro de ocio.

Antes de repartir los regalos a los niños, sus majestades, acompañados por sus pajes, leyeron un pregón para, acto seguido, desplazarse hasta la residencia para visitar a los ancianos y hacerles entrega de un pequeño recuerdo.

Además, la compañía Almozandia fue la encargada de amenizar la espera en el centro de ocio y acercar su música, juegos y adivinanzas. Allí, los Reyes Magos entregaron los regalos y posaron para inmortalizarse junto a los niños en los álbumes familiares. T