El pleno extraordinario que tuvo lugar el pasado 18 de septiembre en el Ayuntamiento de Zaragoza se convirtió en un plebiscito ciudadano en el que un total de 19 colectivos, uno por uno, expresaron su opinión sobre la segunda línea del tranvía. Por poco, ganó la opción del sí a la segunda línea. Fueron diez las asociaciones que se pronunciaron a favor de este medio de transporte. Otras nueve la rechazaron. Y este balance refleja la división ciudadana que existe.

Para Juan Carlos Crespo, de la Asociación de Vecinos de San José, "el modelo de ciudad condiciona la accesibilidad y el transporte. Optamos por una ciudad compacta. La programación de la red de buses urbanos deja mucho que desear. Precisamos una malla básica, con redes principales y secundarias. Preferimos un plan de movilidad sostenible, realizado por nuestros técnicos y no por consultoras. Queremos el tranvía, que se inicien ya los estudios de la línea 2".

Igualmente, se pronunció Carlos Abadías, de la Asociación Amigos del Ferrocarril y del Tranvía, quien indicó que "hace siete años ya intervinimos para apoyar la creación de una nueva línea de transporte en la ciudad. Por suerte, la solución aportada fue la tranviaria. Hoy la línea 1 del tranvía es una exitosa realidad".

Una postura opuesta es la que manifestó Mariano Morón, el presidente de la Asociación Provincial de Autotaxi, quien denunció "el grave daño que nos hacen las restricciones de movilidad con el tranvía. Quiero mostrar mi rechazo a esta segunda línea del tranvía, por calles y avenidas con uso exclusivo asfixiando al sector del taxi. Por dónde quieren que trabajen los 1.800 taxis".