Nuestra it girl de la política autonómica se ha quedado sola por el no tan rotundo que acaba de recibir de los compañeros de hemiciclo a su propuesta de regeneración democrática. Una pena, presidenta Rudi, usted que siempre está a la vanguardia, marcando tendencias, ha perdido su don innato de musa inspiradora. No ha convencido a nadie de la necesidad imperiosa de trabajar un bien tan preciado y escaso como la democracia. ¿No será que la reputación le precede? No podría estar más de acuerdo con su segundo de a bordo, Bermúdez de Castro, en que no es positivo ponerle "fronteras" al diálogo, pero cuando este llega tarde y mal, es hasta comprensible la negativa de los partidos a participar. Tarde, porque hace mucho tiempo que otros grupos como CHA, IU o PSOE plantearon el debate, y mal porque hacerlo justamente en vísperas de unas elecciones parece "oportunista y electoralista", como señalaba Barrena (IU). Pero mal también ya que, si lo que pretende es ganarse la confianza de los de su entorno político y de la sociedad en general, consiga que su discurso sea coherente con sus acciones. No predique regeneración y luego sea incapaz de dejar de percibir sus gastos de representación como presidenta de su partido, algo así como unos 15.000, más los 80.000 de su salario. Sabemos que están sujetos a retención, pero en estos tiempos ya no es cuestión de que no haya ilegalidades, sino de que tampoco haya "inmoralidades", como le recriminaba el presidente de CHA, el señor Soro.

Periodista y profesora de Universidad