El barrio de Torrero acaba de estrenar un parque para personas mayores, el primero de un programa que ha preparado la Concejalía del Mayor del Ayuntamiento de Zaragoza. La inversión de 11.000 euros es casi nimia en relación con el grado de satisfacción de los destinatarios, que hacen ejercicios de piernas, de brazos, de musculación, flexibilidad y estiramientos mientras comparten un buen rato de charla al aire libre. Pocas veces un gasto tan pequeño de dinero público se transforma en una inversión tan satisfactoria y llena de contenido. Más que nada porque los destinatarios suelen reivindicar muy poco y pedir apenas nada.