Ayer, 28 de diciembre, la gente de Teruel Existe se echó a la calle una vez más para manifestar su inocencia al haber creído las promesas del actual Gobierno central. En la citada organización social turolense se cree que los Presupuestos Generales del Estado para el 2005 no recogen partidas suficientes que hagan pensar en una dinamización de las infraestructuras que necesita urgentemente esta provincia y particularmente su capital. Y por eso, el movimiento ciudadano sigue reivindicando el estudio de una línea de alta velocidad ferroviaria con Madrid y un acelerón definitivo a autovías como la que enlazaría el Bajo Aragón con el Mediterráneo, hitos fundamentales para el desarrollo de la provincia. Teruel existe... e insiste en sus reivindicaciones con una urgencia que se hace más imperiosa conforme pasan los años. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que al fin ha mirado hacia Aragón con un claro sentido de la responsabilidad puede redondear con Teruel su apuesta por una comunidad que arrastra notables deficiencias estructurales, y el Gobierno autonómico de Marcelino Iglesias debe a su vez seguir insistiendo para transmitir en cualquier foro la importancia de sacar por fin del ostracismo a esta provincia aragonesa.