El Real Zaragoza ha cambiado desde la llegada al banquillo de Juan Ignacio Martínez, JIM. El técnico alicantino ha levantado el ánimo de un equipo moribundo que, tres meses después, ha vuelto a enlazar tres partidos consecutivos sin perder, lo que le ha sacado de los puestos de condena a Segunda B. De hecho, los siete puntos sumados por el equipo aragonés (victorias en casa ante Lugo y Logroñés y empate en Cartagena) suponen una cosecha solo inferior a la conseguida por otros dos equipos de la categoría, Rayo Vallecano y Tenerife.

Ambos han conseguido el pleno de puntos (9) en estos tres últimos compromisos ligueros. Los madrileños cuentan por triunfos sus duelos en Vallecas ante Las Palmas (2-0) y Alcorcón (2-1) y el disputado el pasado martes en Miranda de Ebro (0-2) y ya son cuartos en la tabla a solo cinco puntos del ascenso directo que marca el Mallorca. También el Tenerife ha ganado sus tres últimos partidos disputados contra Girona (2-0) y Cartagena (3-0) en el Heliodoro y en Castellón (0-1). El pleno le ha servido para abrir brecha respecto a un descenso del que ya le separan seis puntos.

Ningún otro equipo mejora el balance del Zaragoza de JIM, aunque el Albacete, rival este viernes del conjunto aragonés podría haberlo igualado en caso de haber logrado la victoria en su partido ante el Leganés, aplazado por las devastadoras consecuencias de la borrasca Filomena. Antes, el cuadro manchego había ganado al Mirandés a domicilio (0-2) y había empatado en el Carlos Belmonte frente al Málaga (1-1). Las Palmas y Espanyol, con seis puntos sobre nueve posibles, son los siguientes que mejores resultados han obtenido en las últimas jornadas, aunque equipos como el Almería o el Alcorcón han logrado tres pero, al igual que el Albacete, con un partido menos disputado.

Ahora, el siguiente reto de JIM pasa por poner fin a una nefasta racha de siete meses sin ganar fuera de casa de un Zaragoza que es el peor visitante de España (entre Primera y Segunda División). Apenas dos empates lucen en su casillero de puntos a domicilio, si bien el conseguido en Alcorcón se convertiría después en victoria (0-3) en los despachos como consecuencia de la alineación indebida cometida por el cuadro alfarero. El último triunfo en el campo del Zaragoza lejos de La Romareda se remonta al 23 de junio del año pasado, ante el Extremadura, todavía con Víctor Fernández al mando de un Zaragoza que resistía en posiciones de ascenso directo a Primera tras el parón por la pandemia.

Desde entonces, ha caído en diez de los 14 desplazamientos (ante Girona y Albacete la pasada campaña y todos menos los choques jugados en Alcorcón y Cartagena de la actual). En seis de estos últimos se repitió el mismo resultado (1-0). Así fue en Castellón, Almería, Gijón, Leganés, Miranda de Ebro y Tenerife, mientras que en Ponferrada (2-1) y en Barcelona ante el Espanyol (2-0), fueron los únicos escenarios en los que se encajó más de un tanto. Claro que el gran problema viene siendo la ineficacia ofensiva, lo que ha provocado que el Zaragoza apenas haya marcado dos goles fuera de casa en toda la temporada. Uno de ellos, el de Narváez en Ponferrada, no sirvió para evitar la derrota a pesar de que el tanto del colombiano ponía por delante a su equipo. El otro, anotado por Iván Azón en Cartagena (1-1) otorgaba un punto a los aragoneses, ya con JIM en el banquillo.