Francisca B. M., de 35 años, fue arrestada el lunes por la noche en Melilla por la presunta implicación en la muerte de su hija, Sandra G. B., de 15 años de edad, que falleció el pasado viernes tras sufrir una fuerte intoxicación. Los agentes también consideran que la mujer es sospechosa de la muerte de su marido, Antonio G. B., un funcionario de 42 años que sufrió un supuesto infarto el pasado 12 de enero. Además, un segundo hijo de la detenida, A. G., de 12 años, permanece ingresado desde el sábado en la UVI con el mismo cuadro clínico que presentó su hermana.

Durante el interrogatorio, Francisca --que pasará hoy a disposición judicial-- explicó que la intoxicación se originó tras fumigar su casa en noviembre del año pasado. Su marido y sus dos hijos estuvieron ingresados varios días en el hospital.