Un centenar de militares, pertenecientes a la Brigada de Cazadores de Montaña Aragón-1, custodian la línea del AVE entre Lérida y Zaragoza como parte del operativo de seguridad de la boda real. Los soldados, que han instalado su campamento en el municipio zaragozano de La Almolda, rastrean cada día unos 160 kilómetros de línea ferroviaria.