El padre de un joven discapacitado ha denunciado ante el juzgado de Guardia de Almería a un monitor del centro donde está internado su hijo desde hace dos años por agredir al muchacho.

El hijo, de 23 años y con un trastorno psicomotor, tiene "problemas como cambios de carácter" y está internado en el centro concertado Asprodesa de Roquetas de Mar (Almería), donde lleva dos años, según explicó a Efe Santiago Hernández, el padre del joven.

Según la denuncia, a la que ha tenido acceso Efe, el 21 de enero el padre recibió un mensaje de la madre del joven comunicándole que habían agredido a su hijo durante unos talleres que imparten en el centro de día situado en San Agustín, en El Ejido (Almería).

Intentó contactar con él, pero en el centro le dijeron que no podía ponerse porque "estaba cenando", según la versión de Santiago Hernández.

Al día siguiente se trasladó a Roquetas de Mar para hablar con el director, pero le dijeron que estaba reunido y sólo consiguió hablar con un técnico, quien le explicó que su hijo "tiene mucho cuento" y que sólo había habido "un forcejeo".

Cuando consiguió ver al joven "tenía el labio reventado" y le comunicó "que uno de los monitores -el hijo lo identifica por el nombre- le pegó un bofetón y se cayó de espaldas".

En su acusación contra el centro de día de Asprodesa -que ha desmentido a Efe los hechos denunciados a través de un portavoz- apunta que "tras discutir su hijo con una compañera, un monitor le proporcionó golpes en el labio, el pecho y en la cabeza".

"Ni los monitores ni el centro desplazaron a mi hijo al centro de salud para descartar posibles lesiones", añade, además de que el monitor señalado "es reincidente".

Santiago Hernández llevó a su hijo al médico, pues sufría mareos y tenía dolores en la espalda, y el chico fue internado en observación 48 horas en el hospital Torrecárdenas de Almería, donde le diagnostican "un problema de cervicales".

Además le extendieron un parte de lesiones que adjunta a la denuncia, donde se apunta una "laceración en región dorsal interescapular. Equimosis en mucosa yugal labio inferior", así como "contusión de espalda".

Santiago Hernández además teme perder su trabajo por las reiteradas ausencias pero alega que no puede "abandonar" a su hijo "tal y como se encuentra".

Un portavoz del centro consultado por Efe ha desmentido los hechos denunciados y lo achacan a una invención: "Me imagino que acabará todo en el juzgado y en el juzgado se verá, pero es mentira, no sé qué es lo que persigue", ha señalado.