La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Aragón (Fapar) denuncia el cierre de un total de 45 aulas en centros públicos de Zaragoza en tres años, es decir, desde que el PP gobierna en la comunidad. El colectivo realiza este cálculo tomando como referencia el número de unidades que componen la plantilla fija de cada centro, es decir, la capacidad prevista cuando fueron construidos.

Las últimas once supresiones se dieron a conocer la pasada semana. Educación ha decidido reducir aulas en ocho centros públicos de la capital aragonesa. Así, en el curso 2014-15 contarán con una clase menos de 1° de Infantil los colegios Cándido Domingo, Ciudad de Zaragoza, José Antonio Labordeta, La Estrella, Monsalud, Parque Goya y Puerta Sancho. A ellos se une el único concertado que ha sufrido rebaja, La Anunciata.

Además, otros cuatro centros públicos --Antonio Beltrán, Jerónimo Blancas, Recarte y Ornat y Zalfonada-- también perderán un aula respecto a la cantidad para la que fueron concebidos y mantendrán las mismas vías que en el curso actual --dos clases cada uno para alumnos de 3 años-- después de que la tercera clase con la que se amplió su oferta al inicio del proceso de escolarización para atender la posible demanda de sus zonas escolares no haya sido necesaria. En los dos años anteriores, la reducción total había rebasado las 30 unidades.

DIFERENCIAS

La diferencia entre zonas es notable. Las más afectadas son la 1 --incluye el Actur y va hasta San Juan de la Peña--, que, según Fapar, ha perdido un total de 17 aulas de 1° de Infantil desde que el PP accedió al Gobierno. La siguiente con una mayor eliminación de clases es la zona 6, que comprende los barrios Delicias, Oliver y Valdefierro y que, desde el proceso de escolarización para curso 2012-13 habría perdido diez clases, tres más que las quitadas en la zona 7, mientras que la 5 --la más amplia y problemática, ya que recorre desde el centro hasta el sur y que engloba a los barrios en expansión Rosales del Canal, Valdespartera y Arcosur-- es la única que ofrece más aperturas que cierres de aulas en este periodo. Por eso, Fapar reclama a Educación que acometa las construcciones de centros públicos "que sean necesarias" en esta zona y que, mientras tanto, se habiliten aulas puente en estos barrios para evitar el desplazamiento de familias varios kilómetros lejos de su entorno.

Esa diferencia entre zonas se relaciona con la presión demográfica. En este sentido, Fapar destaca que solo este área se libra de la "merma" de niños de 3 años que se escolarizan cada año y lamenta que desde el Departamento de Educación no se atienda su demanda de bajar la ratio --número de alumnos por aula-- "atendiendo a las necesidades demográficas de las distintas zonas escolares, tal como se venía haciendo hasta hace tres procesos de admisión", lo que, según las familias, "garantizaría una mejor atención al alumnado". Sin embargo, la Administración "ha optado por subir la ratio de forma generalizada y uniforme en todos los centros y zonas --máximo de 25 escolares por aula--, lo que, para Fapar, responde a criterios "solo economicistas de ahorro que se anteponen a los de calidad".

Esta decisión provoca, según los padres, dos consecuencias. Por un lado, "desequilibrio" entre centros, ya que "unos se llenan a 25 y otros, menos demandados, quedan con ratios más bajas, con una repercusión negativa sobre la distribución del alumnado en todos los centros". Por otro lado, la pérdida de aulas en centros públicos supone, según Fapar, "un progresivo desmantelamiento de la escuela pública".

En este sentido, la federación aragonesa de asociaciones de padres de la escuela pública recuerda que "el 55%" de las familias zaragozanas apuestan por la escuela pública "y su modelo educativo plural, inclusivo, laico y de calidad".