La rebelión democrática contra el PP tuvo como plataforma a la telefonía. Desde el mediodía del sábado, los móviles activaron con mensajes SMS la indignación ciudadana que salió a la calle. Los eslóganes se multiplicaron por toda España con la clave pásalo . Ciudadanos de Madrid, Barcelona, Sevilla, Pamplona y Albacete reenviaban consignas construyendo un nuevo fenómeno de comunicación. Algunos expertos ya equiparan la capacidad de convocatoria del teléfono móvil con la de la televisión.

Los móviles echaban humo. Y la cadena de llamadas se multiplicó en pocos minutos. ¿Aznar de rositas? ¿Le llaman jornada de reflexión y Urdaci trabaja? A las 22 horas en la sede del PP. Pásalo . Este era uno de los muchos mensajes que se recibían por el móvil. A las 10 de la noche, miles de personas, de todas las edades, exigían la verdad. Algunas radios y teles divulgaron la protesta en Madrid. Se amplificaba la llamada a la protesta.

Según fuentes del sector de telefonía, Vodafone y Amena incrementaron casi un 20% el tráfico de mensajes respecto a otros sábados. Un portavoz de Telefónica Móviles, por contra, aseguró que no habían detectado ningún aumento, al contrario de lo que sucedió el día 12, cuando se celebraron las grandes manifestaciones contra el terrorismo. El año pasado se enviaron 18.900 millones de mensajes por móvil en España, 3.160 millones más que el 2002.

Potencial de agitación"

Armand Balsebre, catedrático de Comunicación Audiovisual de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), cree que este fenómeno "rompe el mito de que únicamente los medios de comunicación de masas, y especialmente la televisión, son capaces de movilizar a la gente".

Lo ocurrido el sábado con las concentraciones ciudadanas contra el Gobierno del PP pone en evidencia, según Balsebre, que "algo tan sencillo como el teléfono móvil tiene un gran potencial de agitación y movilización".