La negociación del convenio de Linamar (conocida por las y los zaragozanos como Alumalsa), está encallada. La sección sindical de CCOO reivindica junto con el resto del comité de empresa,una propuesta salarial para tres años, en la que en definitiva no se pierda poder adquisitivo a la finalización del convenio. Nada que se salga del escenario de negociación en muchas empresas en este momento. De hecho el lema de las organizaciones sindicales para este 3 de noviembre en la convocatoria de manifestación en Madrid es «salario o conflicto». De esto hablamos. Es una vieja disputa, que se agudiza en tiempos de crisis. El conflicto de intereses de capital y trabajo.
En un entorno de inestabilidad y de crisis de precios, en los que es absolutamente claro que las empresas mantienen sus beneficios repercutiendo en los precios del producto, a tenor de los datos del INE, lo que está también claro es que los salarios están creciendo muy por debajo de índice del coste de la vida. En 2021. Y en 2022. No vamos a entrar en la senda de discusión de las pérdidas de la planta y el endeudamiento de la misma porque este es un terreno en el que no vamos a jugar: la deuda es con el grupo y las pérdidas aun siendo reales, se producen, y es nuestra opinión, como en muchas empresas por los movimientos contables internos.
CCOO puede manejar, si los trabajadores así lo respaldan, propuestas que se encuentren siempre en los márgenes de nuestra reivindicación principal, que insistimos es no asumir una pérdida ya asegurada en 2021 junto con una nueva en 2022 y un riesgo de seguir haciéndolo en los sucesivos años de convenio, fundamentalmente en 2023.
La plantilla lleva secundando una huelga diaria de 4 horas desde el 3 de octubre, y la empresa además de un par de reuniones en las que se mantiene pertinaz en el fondo de sus propuestas, ha cruzado una raya inadmisible, con una intentona golpista del órgano legitimo de representación de los trabajadores, que es el comité de empresa, comunicando directamente a la plantilla que iba a pasar a votación su última propuesta. Así, no.
