Nuevo paso hacia la gigafactoría

La adjudicación de 54,4 millones de euros a la planta de Stellantis en Figueruelas para la instalación de la nueva plataforma STLA Small supone una nueva inyección de optimismo para las aspiraciones de Aragón de convertirse en uno de los epicentros del sector del automóvil y de la electromovilidad en España. Esta inyección económica, procedente de los fondos europeos, servirá para desarrollar los modelos eléctricos pequeños de las marcas que la multinacional fabricará a partir del año 2026, y representa un paso más en el camino de la factoría aragonesa de consolidarse como una planta más que relevante para el futuro de Stellantis. El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, fue el encargado de comunicar esta noticia durante su participación en la clausura del XI Foro Rural Somos Litera, celebrado en Binéfar (Huesca), y al que también asistió el presidente aragonés, Jorge Azcón.

La asignación de estas ayudas, procedentes de la línea B de la segunda convocatoria del Perte VEC (Vehículo Eléctrico y Conectado), supone una muestra de la confianza depositada por parte del Gobierno España en el grupo pilotado por Carlos Tavares –que tiene plantas en Vigo, Madrid y Zaragoza–, en un momento en el que crecían las dudas sobre la voluntad del Ejecutivo de Sánchez de apoyar los proyectos desarrollados por la multinacional en España. «Este es el certificado del apoyo del Gobierno a Stellantis», apuntó ayer Hereu. Con esta adjudicación, la compañía suma más de 113 millones recabados en España a través de los fondos de la Unión Europea. Todos ellos servirán para garantizar el futuro de la fábrica durante la próxima década e impulsar su sostenibilidad y eficiencia –dos factores claves en la mejora de la competitividad– y, por tanto, la rentabilidad de la planta.

Sin embargo, todavía existen algunas incógnitas en el seno de Stellantis, sobre todo vinculadas a la construcción de una gigafactoría de baterías para coches eléctricos en Figueruelas. Quizá por ello, el ministro de Industria recordó que todavía existe una tercera convocatoria del Perte VEC, dotada con 500 millones de euros (300 millones en subvenciones y 200 en préstamos) para impulsar la fabricación del coche eléctrico en España. En eso confía Stellantis, pero también el Gobierno y las instituciones aragonesas.

La valoración del Gobierno de Aragón fue positiva, ya que representa «un primer paso para seguir avanzando en un proyecto estratégico y prioritario» como es la instalación de la planta de baterías de Stellantis, subrayó la vicepresidenta y consejera de Economía, Mar Vaquero. Figueruelas ya ha recabado ayudas por valor de 55,8 millones de euros para la gigafactoría, todavía lejos de los 200 millones a los que aspira el grupo automovilístico. Habrá que seguir esperando.

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