César Alierta ha aportado, ya sea directamente o avalando a través de la capitalización de préstamos, 17 de los 22 millones de euros asumidos por la Fundación Zaragoza 2032 desde su entrada, hace siete años, al Real Zaragoza. Lo ha hecho a través de so sociedad, Prado de Altaoja, mediante la que controla el 49% de la entidad, aunque el porcentaje supera el 50% al sumar el de su sobrino, Fernando Sainz de Varanda (1,56%). Él, Alierta, ha sido y es capital para un Real Zaragoza al que el expresidente de Telefónica rescató de una situación desesperada aquel verano del 2014, cuando el club parecía abocado al abismo.

El máximo accionista del Real Zaragoza es el único que ha aportado dinero siempre, como lo hizo hace dos años, cuando quedó aprobada la ampliación de capital que daba inicio a nueva era con Alierta ya al mando. La actuación se llevaba cabo a través de una capitalización de deuda por valor de 1,86 millones de euros, lo que propiciaba que el capital social pasara de los 4,5 millones a 6,38. Mediante este movimiento, Alierta se convertía en el dueño del Real Zaragoza, a lo que se daba oficialidad en una Junta Extraordinaria en la que también se aprobaba el nombramiento de un nuevo Consejo de Administración al que accedían Juan Uguet de Resayre y Luis Blasco Bosqued, dos personas de confianza de Alierta, De este modo, tres de los seis miembros del consejo (Uguet, Blasco y Sainz de Varanda) pasaban a ser de la confianza de Alierta en una maniobra destinada a adquirir un mayor peso específico en el día a día y afianzar su poder en el club, algo que el aragonés llevaba tiempo deseando.

De los 15,9 millones que se le adeudan a la Fundación, 14,2 corresponden a tres préstamos participativos, por lo que la entrada de nuevos accionistas exige la renegociación de esa deuda, en la que el propio César Alierta es el principal acreedor .

Además, la deuda global del club asciende a 71,026 millones de euros. El 38,5% (27,367 millones) corresponde a cantidades a pagar pendientes y posteriores tanto al concurso de acreedores como a los créditos privilegiados, la mayoría con Hacienda y con entidades bancarias, que ascienden a 43,659 millones. Esa deuda posterior tiene en los patronos de la Fundación Zaragoza 2032, en los créditos y préstamos avalados, a sus mayores acreedores, con hasta 15,927 millones de euros, de los que 14,2 corresponden a tres préstamos participativos de esta entidad que se hizo con el club en el 2014, aunque ya hace tiempo que no funciona como un ente único.

Así, la Fundación aglutina hasta el 22% de la deuda pendiente del Real Zaragoza, con un plazo de vencimiento que finaliza en junio del 2031, si bien cada año se va reduciendo esa cantidad que se les adeuda a los actuales propietarios. Por ejemplo, en la temporada 19-20 se redujo en 3,2 millones, de los que 1,860 correspondieron a la ampliación de capital del 2019 mediante capitalización de deuda.