El Real Zaragoza vendió ayer alrededor de 200 entradas del cerca del millar que pudo liberar para el partido de este jueves frente al Sevilla correspondiente a los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. La jornada festiva, el hecho de que los pequeabonados entren gratis y el interés que ha suscitado un rival de Primera División hacen al club ser optimista de cara a registrar una buena entrada. Para este encuentro entran en vigor las nuevas restricciones de aforo, limitado al 75% de la capacidad del estadio.

El encuentro, además, no está incluido en el abono de la temporada. Los socios abonados debían pagar diez euros por entrada y disponían de hasta un máximo de seis a ese mismo precio reducido para acompañantes. La entidad ha despachado hasta 5.000 localidades a ese precio.

Aunque las nuevas restricciones obligaron al club a paralizar la venta de entradas, en la jornada de ayer puso a la venta en torno al millar para el público en general. Esas localidades corresponden a las destinadas a patrocinadores y empresas, al convenio con colegios del ámbito deportivo, las solicitadas por técnicos y personal de otros equipos y las sobrantes de la zona destinada a los aficionados rivales. Medio centenar de sevillistas disponen de entrada, por lo que el club reducirá el espacio destinado a la afición visitante.