REAL ZARAGOZA

Fran Escribá: «Saquemos una lectura positiva»

El técnico valoró el buen partido del Zaragoza hasta los dos errores finales e «incomprensibles»

Escribá y Ramírez salen juntos al césped de El Molinón.

Escribá y Ramírez salen juntos al césped de El Molinón. / MARCOS LEÓN / LNE

No fue fácil para Fran Escribá explicar lo sucedido en El Molinón. «No lo sé, es el clásico partido que tiene una explicación muy sencilla pero resulta incomprensible porque después de dominar y tenerlo controlado acabamos con la sensación de que si caía el tercero era para cortarse las venas», resumió el técnico, que enumeró las virtudes de su equipo. Controlamos muy bien el partido, fuimos superiores todo el tiempo, estuvimos más cerca de marcar nosotros que ellos, recurrieron al centro lateral con Cote pero no tenían claridad», apuntó.

Todo muy bien pero... en los últimos minutos el Real Zaragoza se dejó dos puntos que tenía en el bolsillo. «En el minuto ochenta y tantos tenemos una pérdida en la salida de balón y ahí vino el 1-2. Y lo otro es lo sencillo de explicar pero inexplicable. Hicimos un buen partido ante un rival que no se había dejado ningún punto en casa», continuó el técnico, que quiso ser positivo. «Aunque ahora es imposible verlo, saquemos una lectura positiva de lo que puede hacer el equipo. Y de lo que pasa si no estamos concentrados», advirtió el valenciano.

No quiso ahondar en el fallo de Poussin («no esperábamos un fallo de estas características») pero sí destacar su buena actuación hasta el error del empate y mostrarle todo su apoyo, el suyo y el de todo el vestuario. Porque Fran Escribá se marchó satisfecho del partido de su equipo y de cómo desarrolló el plan que había previsto el cuerpo técnico. «En mi dibujo, luego como decía aquel, los jugadores se mueven, era un 4-3-3. Sabíamos que Gaspar abandona la banda y aparece por dentro, entonces Marc, aparte del criterio que tiene con el balón, tenía la misión de controlar esa segunda línea que llega muy bien y, con Maikel y Toni, apretar a sus medios. En la segunda parte ya no ha metido pases decisivos», explicó.

El técnico ahondó en su plan de partido. «Nuestra idea, sabiendo que no teniendo a Pascanu iban a tener defensa de cuatro, era que nuestros extremos iban a apretar arriba. El dibujo era un 4-3-3 que nos permite tener más control del juego y, con Maikel, tener mucha llegada con peligro, porque ya lo hacía así en el Albacete. La pizarra ha salido perfecta durante ochenta y tantos minutos pero se nos estropeó con unos errores que nos han costado dos puntos que ya teníamos», aseguró Escribá.

El entrenador zaragocista también explicó lo que había ocurrido tras los cambios del conjunto local buscando el gol. «Yo he tenido a Cote, en el Villarreal, no necesita ser profundo, como Hassan en la segunda parte, porque te centra desde tres cuartos y tiene un pie privilegiado. Sabíamos que lo sacaban para eso, para generar a balón parado. Defender eso es complicado, para Bermejo y para cualquiera, porque no necesita ni siquiera espacio para sacar centros. Pero la lectura es que no nos marcaron por esos centros laterales de Cote, que lo hubiera entendido, como fue al final el 1-2, pero no con una pérdida nuestra en la salida del balón y, por supuesto, no con el segundo error. Entre el 1-2, los minutos que pasaron y demás pareció un agobio que no fue tal en cuanto a ocasiones pero sí en posición en el campo», indicó.

Escribá también se refirió a los aficionados. «Hacen un esfuerzo de la hostia. Llegamos a los estadios y se ve gente del Real Zaragoza. Es un orgullo tener esta afición. Este año da para mucho. Vamos a estar ahí arriba. Esto es muy largo, pero estamos en el buen camino», señalo en televisión.