Real Zaragoza

La escasez goleadora del Real Zaragoza. Gotas contra la sequía

El equipo aragonés ha marcado en las 2 últimas jornadas tras no haber visto puesta en las 4 anteriores 

Lleva 4 años seguidos con menos de un tanto por partido a estas alturas

Los jugadores zaragocistas celebran el tanto marcado por Maikel Mesa ante el Leganés.

Los jugadores zaragocistas celebran el tanto marcado por Maikel Mesa ante el Leganés. / JAIME GALINDO

Jorge Oto

Jorge Oto

El gol viene siendo un serio problema para un Real Zaragoza que acumula mucho tiempo reñido con el marco contrario. Y eso que todo parecía distinto a comienzos de temporada, cuando el conjunto aragonés enlazaba victorias firmadas sobre un absoluto dominio de las dos áreas. También de la ajena, donde encontró el gol en las primeras seis jornadas, cuando era líder en solitario.

Pero no duraría demasiado el acierto. Poco a poco, la sequía que viene azotando al Zaragoza en las últimas temporadas también lo fue envolviendo todo hasta oscurecer de lo lindo el panorama y devolver al equipo a su habitual sufrimiento a la hora de generar y crear ocasiones a través de las que encontrar el gol.

De hecho, el promedio anotador se mantiene en la misma dinámica que en las anteriores temporadas, por debajo de un gol por partido. 18 dianas en 19 partidos advierten, de nuevo, de que la sequía sigue aquí. Y eso que la cifra es ligeramente superior a la registrada a estas alturas en las últimas campañas, sobre todo, el año pasado, cuando apenas había celebrado 14 goles, los mismos que en la 20-21 y tres menos que los 17 conseguidos en la 21-22. Así, el Zaragoza acumula cuatro campañas seguidas llegando a estas alturas del curso macando menos de un gol por choque, un lastre demasiado pesado para un equipo instalado en la mediocridad desde la pandemia.

Al menos, Julio Velázquez parece haber empezado a revertir la tenebrosa dinámica que había llevado al equipo a enlazar tres encuentros consecutivos (los últimos de Escribá en el banquillo) sin hacer diana. En La Romareda contra Oviedo (0-0) y Huesca (0-2) y en Elche (2-0), el conjunto blanquillo profundizó en su enemistad con el marco contrario, algo que el nuevo técnico zaragocista no fue capaz de cambiar en su estreno en el banquillo, en Albacete, donde tampoco hubo manera de marcar (1-0). 

Aunque la cosa ha cambiado en las dos últimas fechas. Los enfrentamientos ante rivales poderosos han devuelto el gol a un Zaragoza que anotó (1-0) ante el Leganés, líder de la categoría, y que volvió a ver puerta el pasado viernes en Cornellá frente al Espanyol (1-1) aprovechando su superioridad numérica tras la expulsión de Calero antes del primer cuarto de hora de la segunda mitad. 

Dos goles en 450 minutos

En total, apenas dos goles en los últimos 450 minutos que subrayan la manifiesta dificultad del Zaragoza en perforar la portería adversaria, aunque los dos últimos aciertos consecutivos invitan a albergar ciertos motivos para la esperanza

Pero queda un largo camino por recorrer. Porque, aunque ha vuelto, el gol llega a cuentagotas. Hace cerca de dos meses que el Zaragoza no marca más de un tanto en un partido. Fue ante el Eibar en La Romareda (2-3) el pasado 21 de octubre y, para colmo, no sirvió para evitar una derrota impensable al descanso, cuando los aragoneses vencían por 2-0. Sin embargo, una nefasta segunda mitad y la reacción de la escuadra armera provocó el derrumbe de un Zaragoza sin capacidad de reacción.

Pero, más allá de aquellas cinco primeras jornadas en las que todo era luz, el Zaragoza no ha sido capaz de superar una sequía que le ha perjudicado seriamente la salud. En la mitad (7) de los otros 14 encuentros disputados esta campaña, el equipo aragonés ha sido incapaz de hacer un gol y solo en Gijón (2-2) celebró más de uno, aunque entonces tampoco sirvió para llevarse el triunfo ya que el cuadro asturiano aprovechó dos errores letales (sobre todo uno de Poussin en el descuento) para nivelar una contienda que tenía perdida en el minuto 85 (0-2).

Al menos, el Zaragoza, que está entre los seis equipos menos realizadores de la categoría, puede celebrar el reencuentro de Manu Vallejo con un gol que no celebraba desde la quinta jornada (10 de septiembre) en Cartagena. El andaluz, que marcó el tanto del empate ante el Espanyol cuando apenas llevaba un minuto sobre el campo, es uno de los nueve componentes de la plantilla que han anotado. Mesa, firmante del gol del triunfo ante el Leganés, es el máximo artillero con cuatro dianas, las mismas logradas por Mollejo entre Liga y Copa.