La actualidad del Real Zaragoza

La paradoja viajera del Real Zaragoza

Cumple antes de jugar en el Ciudad de Valencia este sábado 6 meses y 12 partidos sin ganar fuera de casa, pero solo el Huesca ha caído menos veces a domicilio que los zaragocistas, que han perdido 5 partidos de viajero

No gana desde el 5 de octubre, cuando Escribá lo logró en Andorra y el Zaragoza era el mejor forastero de la categoría. Velázquez se fue sin victorias fuera y Víctor empezó con unas tablas en Anduva

Pau Sans y Toni Moya, tras el empate en Anduva ante el Mirandés.

Pau Sans y Toni Moya, tras el empate en Anduva ante el Mirandés. / CARLOS GIL-ROIG

Admiten poca discusión los datos del Real Zaragoza como viajero en la historia reciente, esos seis meses exactos que se cumplen este viernes sin ganar desde que lo hizo en Andorra el 5 de octubre, aún con Fran Escribá al mando, la peor dinámica viajera de su historia en Segunda y los 511 minutos sin anotar una diana desde que la marcara Maikel Mesa en Elda el 15 de enero, en el primer partido de este 2024. Sin embargo, el conjunto zaragocista, en el que Velázquez no llegó a estrenar el casillero de triunfos en las ocho salidas con el técnico pucelano mientras que Víctor solo pudo firmar tablas en su estreno en Anduva, no ha perdido apenas encuentros a domicilio, solo 5 en todo el curso (Racing de Ferrol, Elche, Albacete, Eibar y Valladolid). Únicamente el Huesca ha caído menos veces de visitante, mientras que Leganés, Cartagena y Levante igualan las derrotas blanquillas.

El problema, claro está, es que su contador de victorias se ha quedado a cero desde que Mollejo sellara la conquistada en El Principado. Entonces, jornada nueve, el Zaragoza era el mejor viajero de la categoría en promedio de puntos, con 9 (tres triunfos en Tenerife, Cartagena y Andorra y una derrota en Ferrol) de 12 posibles, ya que el Espanyol había sumado 10, pero en cinco duelos. Ahí comenzó una racha que dura hasta la actualidad. Escribá ya no volvió a vencer fuera, con tablas contra Sporting y Burgos y derrota en Elche, mientras que Velázquez empezó cayendo en Albacete y sumó después empates ante el Espanyol, el Amorebieta, el Eldense y el Alcorcón para caer de nuevo en Ipurua con el Eibar, empatar frente al filial del Villarreal y firmar su sentencia con la derrota en Pucela, en su ciudad no de nacimiento, pero sí donde se crio.

Víctor, queda dicho, empezó con tablas en Anduva ante el Mirandés, pero ahora tiene por delante el reto de volver a ganar a domicilio tras una mala racha que ya dura 12 jornadas de Liga de viajero, a las que hay que añadir el doloroso traspié en Copa ante el Atzeneta pocos días antes de que Escribá firmara su carta de despido. Así que el Levante y el Ciudad de Valencia suponen la oportunidad para acabar con esa terrible racha teniendo en cuenta que en esos últimos 36 puntos que ha puesto en juego fuera de casa sin victorias el Zaragoza ha sumado ocho, a través de las tablas, con cuatro derrotas. Y no sería el peor en este tramo de salidas en esta Segunda, porque desde que logró esa última victoria el conjunto zaragocista, el Villarreal B ha sumado 4 puntos de viajero, el Albacete y el Andorra, cinco y el Tenerife y el Mirandés los mismos ocho que los blanquillos. El contraste son los 20 puntos fuera de casa que ha sumado en estos seis meses el Elche y los 18 del líder Leganés, por los 16 de Cartagena, Racing y Huesca.

El Andorra aún más

Y, pese a llevar tanto tiempo sin ganar a domicilio, hay un equipo de Segunda al que la espera se le está haciendo más larga, el Andorra, que solo suma una victoria y la logró en la primera jornada de Liga, a mediados de agosto y en Butarque, mientras que el Albacete lleva el mismo tiempo sin vencer a domicilio que los zaragocistas, desde la novena cita del campeonato, y el Levante, desde la décima. En números globales y gracias a su buen arranque y a la suma de sus empates en estos últimos meses el Zaragoza es el décimo visitante de la categoría, con 17 puntos y un balance de tres triunfos, ocho empates y las mencionadas 5 derrotas. En casa suma más puntos, 24, pero también lleva más derrotas, hasta siete, que de forastero.