Una de las bifurcaciones de la colada que surgió del cono secundario del volcán de La Palma está a un kilómetro de la iglesia del barrio de La Laguna pero apenas ha avanzado en las últimas horas, sobre cien metros, y la previsión del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca) es que se acabe parando.

Eso, si no recibe "un enorme empuje" en su zona trasera, ha indicado el portavoz del comité de dirección del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, quien ha vuelto a destacar que ese ramal de la nueva colada necesita "un impulso permanente detrás" para que siga avanzando.

Esa lengua de lava se está encontrando a su paso mucho material que ha de engullir, lo que le hace ganar en viscosidad, pese a que en la zona trasera se vea correr líquida y a gran velocidad.

"Estaremos atentos a si el empuje se modifica y la colada pudiera avanzar más deprisa, pero ahora mismo no pensamos que pueda llegar a La Laguna", ha abundado Morcuende, de ahí que por el momento no estén previstas más evacuaciones.

Parte de esa bifurcación más al norte discurre junto la colada 8, la que en su día se adentró en el casco urbano del barrio de La Laguna, o bien "galopa" sobre la misma, mientras que el otro ramal se dirige hacia las coladas centrales, concretamente la 4, 5 y 7.

La portavoz del comité científico, María José Blanco, ha destacado que todos los centros de emisión del volcán estuvieron inactivos en algunos momentos sobre las 11.00 horas de este lunes.

Respecto al parón de casi 30 horas del cono principal, Blanco ha matizado que "visiblemente" no parecía emitir lava en superficie, pero las coladas centrales se han seguido alimentando a través de tubos, y ha añadido que "ni mucho menos" se puede descartar que vuelva a recuperar todo el vigor que ahora muestra el secundario.

La también directora en Canarias del Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha indicado que la medición de dióxido de azufre en el penacho, cuya orientación en las próximas 48-72 horas seguirá siendo favorable para la navegación aérea, arrojó de nuevo un valor alto, sin concretar.

Aumento de la sismicidad intermedia

Asimismo, ha hecho hincapié en el aumento de la sismicidad intermedia y en concreto de un terremoto de magnitud 4,3 con hipocentro a 13 kilómetros, el mayor en ese rango desde el comienzo de la erupción el pasado 19 de septiembre.

Según se recoge en el informe del comité científico, este lunes se superó el valor límite diario de acumulación de SO2 en Los Llanos de Aridane y Tazacorte, aunque hoy los valores se mantienen en niveles entre razonablemente buenos y buenos en el resto de la isla.

Con respecto a las partículas menores de 10 micras (PM10), los niveles son buenos y razonablemente buenos.

Miguel Ángel Morcuende ha avanzado la previsión de calima para la jornada del sábado, lo que empeoraría la calidad del aire.

Según los últimos datos actualizados, la superficie afectada por las coladas asciende a 1.134 hectáreas.

De acuerdo con datos del Catastro, han resultado destruidas 1.548 edificaciones, de las cuales 1.214 de uso residencial, 169 agrícola, 69 industrial, 37 de ocio y hostelería, 15 de uso público y 16 de otros usos, mientras que el sistema Copernicus eleva la cifra a 2.860 edificaciones afectadas, de las cuales 2.748 destruidas.

La superficie de cultivos arrasados aumenta a 348,86 hectáreas, 8,27 más que el anterior dato, de las cuales 217,09 de plataneras, 61,2 de viñas y 26,48 de aguacates. Aparte, hay otras 90 hectáreas aisladas entre coladas y otras 600 afectadas por la caída de cenizas.

De las más de 7.000 personas desalojadas, hay albergadas en hoteles 537, nueve más que este lunes, y otras 43 dependientes en centros sociosanitarios.