¿De qué están hechas las bolas y los bombos de la Lotería de Navidad?

Cada 22 de diciembre caen miles de bolas de un bombo gigante y en otro un poco más pequeño. En uno están los 100.000 números que entran en el Sorteo Extraordinario de Navidad, mientras que en el otro las pedreas y todos los premios que van desde los quintos hasta el Gordo.

Esas bolitas de la fortuna son la imagen de la esperanza, de la alegría y de la suerte. Siempre se suele reparar en los niños de San Ildefonso a los que les toca el maravilloso privilegio de llevar la ilusión a muchos rincones de España cantando el Gordo de la Lotería de Navidad, pero no tanto en las bolitas mágicas con las cinco cifras del número agraciado y las siete de los 4.000.000 de euros que corresponden.

¿De qué material están hechas? ¿Se cambian cada año o se almacenan? ¿Qué ocurre si alguna se deforma o sufre daños? ¿Y siempre han sido del material actual? Contestamos a todas estas preguntas.

Las respuestas

Lo primero que hay que tener en cuenta es que este sorteo extraordinario viene realizándose desde 1812 y, como es lógico, no son ni los mismos bombos ni las mismas bolas desde entonces, ya que tendrían 209 años, así que se han ido actualizando.

Entonces, en el primer sorteo, eran de cédulas de papel, aunque un año más tarde cambiaron y ya fueron de madera, que es precisamente el material que se utiliza hoy en día para las bolas.

Son de madera de boj y la empresa que las hace desde hace muchos años se llama Mabe Online. Es un color con tintes amarillentos, algo que se puede observar a simple vista, sobre todo cuando la televisión hace zoom en los premios grandes.

Y generalmente se guardan de un año a otro, pero los propios trabajadores hacen cada año una lista de las que hay que cambiar porque están deterioradas por el paso del tiempo. Mismamente, del sorteo de 2020 al de este 2021, Loterías ha cambiado 193 bolas.

Cada bola tiene un peso de 3 gramos y un tamaño de 18 milímetros, mientras que los dos bombos tienen 15 años y están formados por una aleación de bronce y latón. El grande, que tiene que albergar 100.000 números, mide 2,64 metros, tiene 2,11 de ancho y pesa alrededor de 850 kilos, mientras que el pequeño, el de los 1.807 premios, tiene 1,60 metros de alto, 1,28 de ancho y pesa unos 450 kilos.