El incendio que el pasado sábado arrasó con un edificio de la calle Miguel de Ara de Zaragoza, en el entorno de Zamoray-Pignatelli, más allá del susto y las pérdidas materiales (no se produjeron víctimas mortales), ha supuesto una oportunidad para el ayuntamiento. Según desveló ayer el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, desde su área se plantean comprar el solar en el que estaba el inmueble, a la altura del número 36 de esta calle.

La adquisición se haría con cargo al plan especial para Zamoray-Pignatelli, que tiene una partida específica y reservada para la compra de solares y edificios. En total, el ayuntamiento cuenta este año con 2,5 millones de euros para realizar este tipo de operaciones, que tienen como objetivo regenerar esta zona de El Gancho y ofrecer nuevas viviendas que consigan atraer nuevos pobladores.

El edificio de Miguel de Ara 36 no estaba contemplado en la lista inicial que manejaba el ayuntamiento sobre los inmuebles que se iban a intentar comprar. Sin embargo, explicó Serrano, las nuevas circunstancias, producidas por elementos «exógenos», abren la puerta a que esta operación se materialice.

Y es que según la última revisión de los técnicos de Urbanismo, el edificio tiene que ser derribado pues el fuego provocó daños irreparables en la estructura del inmueble. Así, el consistorio ha dado un plazo de 48 horas a la propiedad para iniciar los trámites de la demolición y, en caso de que los dueños no actúen, será el propio consistorio el que ejecute los trabajos por vía de urgencia, aunque luego pueda repercutirles la factura de las obras a los particulares.

Serrano explicó que el edificio, con siete viviendas (algunas de las cuales estaban ocupadas) tenía tres dueños diferentes: cinco pisos eran de un único tenedor, y los otros dos restantes de otros dos propietarios diferentes.

El fuego se originó en madrugada del sábado y dos personas tuvieron que ser atendidas por inhalación de humo. El hueco de la escalera actuó como chimenea, lo que favoreció la propagación de las llamas.