Las piscinas de Zaragoza se han convertido en la mejor alternativa para sobrellevar este verano tan caluroso. Durante el pasado mes de julio, las instalaciones municipales incrementaron un 15% sus usos respecto a 2019, y llegaron a doblar el número de bañistas en los días de ola de calor. Además de por las altas temperaturas, porque sale más barato ya que el ayuntamiento rebaja el precio de las entradas, de 4 euros a 2,5 euros.
El 38% de los usuarios de todo el mes de julio accedió a los centros públicos durante el largo episodio de calor (del 12 y el 19 de julio). Así, de los 403.481 accesos del mes pasado, 154.100 se concentraron durante los días más calurosos, hasta ahora, de este verano. El domingo 17 de julio se registró el pico de mayor demanda, con 24.194 entradas.
Tras dos años de restricciones y aforos, la temporada de verano está siendo todo un éxito en la capital aragonesa. La afluencia de los primeros días de junio (los centros abrieron el día 11) ya dejaban entrever que las cifras superarían a las de 2019. Unas expectativas en las que influyó, y mucho, la temprana ola de calor del 14 al 19 de junio, cuando las instalaciones alcanzaron los 105.585 usos, de los 225.430 total.
Mientras que en junio los días de mayor afluencia fueron los sábados, en julio sucedió los domingos. Claro está, la demanda se dispara durante los fines de semana, contando con el viernes, cuando la afluencia empieza a notarse por las tardes.
La piscina con más éxito es la de La Granja, que vendió 44.519 pases durante el mes de julio. Le siguen las de Actur (36. 679); Aberto Maestro (33.955) y Delicias (32.053), ubicadas en barrios con más población.
Este año las piscinas del Palacio de Deportes, popularmente conocidas como El Huevo, están cerradas, y las de Casetas acaban de inaugurarse con unos vasos totalmente renovados. En cambio, en 2019 fue la de Gran Vía la que no abrió sus puertas por obras, ya que sometió a una reforma integral.
