El Ayuntamiento de Zaragoza quiere evitar la proliferación de orugas procesionarias la próxima primavera, y para ello va a realizar un tratamiento a los pinos de algunas zonas de la ciudad para impedir que este pequeño y molesto animal consiga anidar en los árboles.

Para ello, el servicio de Parques y Jardines ha sacado a licitación pública un concurso para que sea una empresa externa al consistorio la que lleve a cabo los trabajos. El tratamiento escogido será la endoterapia, que supone la introducción en los árboles de una solución venenosa para las orugas que, a través de la savia, llega a las hojas de los pinos, que es de lo que se alimentan estas larvas de insecto.

El valor estimado del contrato es de casi 15.000 euros y el ayuntamiento ha determinado en qué zonas de la ciudad se aplicará este tratamiento. Será cerca de los colegios, centros cívicos y otras zonas susceptibles de ser frecuentadas por niños o por población vulnerable. En total, se llevará a cabo en 49 ubicaciones diferentes.

La procesionaria del pino es una de las plagas más frecuentes en el arbolado de Zaragoza puesto que afecta directamente a los usuarios. Esta oruga desprende pelos urticantes que generan reacciones muy dolorosas en los humanos pero también en las mascotas.