Política municipal

El Ayuntamiento de Zaragoza invertirá en la depuración de aguas 1,5 millones en 2024

El área de Urbanismo reservará una partida para adecuar los equipos de La Cartuja

La planta está obsoleta y la capital busca la implicación del Ejecutivo aragonés

Imagen de archivo de la depuradora de La Almozara.

Imagen de archivo de la depuradora de La Almozara. / ÁNGEL DE CASTRO

Carlota Gomar

Carlota Gomar

El Gobierno de Natalia Chueca destinará el próximo año 1,5 millones a la adecuación y mantenimiento de las depuradoras de Zaragoza, con más años de los deseados. La alcaldesa tiene por delante la ardua tarea de buscar financiación para alargar la vida útil de la planta de La Cartuja, con 30 años a sus espaldas y unos sistemas anticuados y obsoletos que le dificultan cumplir con las exigencias del cambio climático y garantizar los límites de vertido exigibles.

El concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano, adelantó en la comisión de su área que el próximo presupuesto de 2024 incluirá una partida de 1,5 millones de euros dirigidos a mantener el nivel de renovación y actualización de los equipos de la depuradora de La Cartuja.

La situación de esta planta es problemática y así lo admiten desde el propio Gobierno municipal, que planteará en la próxima bilateral la necesidad de que el Gobierno de Aragón se involucre económicamente en la construcción de una nueva depuradora. Este sería el escenario ideal, pero también el más costoso.

La CHE alerta del estado de la planta de La Cartuja

Ya en 2021, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) urgió al ayuntamiento valorar alternativas para «un tratamiento mayor y más seguro de las aguas residuales» de la ciudad. En un informe en el que reseñaba el «preocupante estado» de las instalaciones, el organismo de cuenca barajaba tres alternativas: la sustitución de la planta de La Cartuja, su ampliación o la construcción de una nueva en la margen izquierda del Ebro. Todas ellas muy costosas para las arcas públicas. La realidad es que el diseño de las actuales instalaciones no permite que se puedan acometer las actuaciones y las mejoras necesarias.

Serrano subrayó en la comisión que desde 2019 se han invertido 12,9 millones de euros en mejoras significativas de los equipos para «cumplir con los estándares de depuración». Una inversión que no ha permitido que se resuelvan todos los problemas relacionados con los límites de emisión. Unos «incumplimientos» que, apuntó, son «absolutamente puntuales».

Desde el área de Urbanismo aseguran que se está trabajando «en mayores avances y perfilando alternativas y posibilidades» que dependerán directamente de que el Ejecutivo de Jorge Azcón se implique. Todo apunta a que será así, ya que durante su etapa como alcalde, el popular ya manifestó en alguna ocasión la necesidad de que el Gobierno aragonés se implicase.

La sociedad Ecociudad

Desde el PSOE, su portavoz, Lola Ranera, cuestionó el uso que Azcón hizo de Ecociudad, la sociedad que se encarga de la gestión de los servicios de saneamiento y depuración de las aguas residuales. «Lejos de utilizarla para invertir en la depuración de las aguas decidió que lo hiciera en la operación calles. A Azcón le interesaba más cortar cintas», criticó Ranera. El anterior Ejecutivo pidió un préstamo de 11 millones a través de esta sociedad para poder acometer reformas tan importantes como la avenida Navarra. Según la socialista, esta decisión «condenó» a la sociedad, que ahora no tiene capacidad para asumir un proyecto de mayor calado en la depuradora de La Cartuja.

También instó al ahora presidente de Aragón, Jorge Azcón, a que compense los impuestos que abonan los zaragozanos a través del Impuesto Medioambiental sobre las Aguas Residuales (IMAR), que rediseñó el Gobierno socialista de Lambán, y sobre el depósito de residuos. Ingresos que de los que se beneficia la DGA y que, Azcón, en su momento, reclamaba que sirvieran para invertir en la capital.