Vox pide cambiar de nuevo su lugar en el pleno de Zaragoza como reacción a los acuerdos del PSOE y Junts

Donde dije digo, digo Diego. El grupo parlamentario de Vox en el Ayuntamiento de Zaragoza se ha desdicho a propósito de su ubicación en el salón de plenos del consistorio y, cuatro meses después de pedir ubicarse en la bancada de la izquierda para evidenciar el gobierno en minoría de Natalia Chueca, han solicitado deshacer lo andado y ponerse del lado de "los demócratas y los defensores de la Constitución".

El detonante ha sido el acuerdo entre PSOE y Junts per Catalunya para que los independentistas apoyen la investidura de Pedro Sánchez, una decisión que ha ido acompañada de una reacción política en las instituciones, a todos los niveles, y en la calle contra estos pactos.

La ley de amnistía, la condonación de 15.000 millones de su deuda a Cataluña, la cesión de la red de cercanías y "la posibilidad de un referéndum de autodeterminación", en palabras de Vox, aunque el texto entre las dos formaciones aluda en este sentido a "la negociación y los acuerdos como método de resolución de conflictos", han sido los detonantes para el partido ultra en el consistorio de la capital aragonesa. "Se está produciendo un autogolpe de manual", ha afirmado el portavoz de Vox, Julio Calvo.

“Hoy tenemos que dejar de lado los asuntos partidistas, porque en estos momentos no se trata de diferenciar entre derecha e izquierda o entre gobierno y oposición, sino diferenciar entre demócratas y golpistas y nosotros. Estamos en el bando de los demócratas y de los defensores de la Constitución, y queremos marcar una distancia infinita con todos aquellos que están apoyando un golpe de Estado que puede acabar con el régimen democrático con el que vivimos desde 1978, cuando se aprobó la Constitución”, finaliza Calvo.

La alcaldesa, Natalia Chueca, será la que dé respuesta a esta petición.