--¿Cómo se toma la competencia de Barcelona?

--Con deportividad olímpica. Estoy tranquilo y preocupado a la vez porque es un rival fuerte. En todo caso, es una noticia que entraba dentro de las posibilidades porque las ciudades son libres de presentarse. De todas formas, me parece inoportuno porque supone una duplicidad, que en un país como España, no beneficia a ninguna de las dos.

--¿Ambas propuestas saldrán perjudicadas?

--Está claro. Para tratar de ganar tanto Barcelona como Zaragoza tratarán de poner de relieve sus virtudes, pero también los defectos del rival. Y eso nos hace más débiles para competir con otras candidatas extranjeras. En cualquier caso, como aspecto positivo, la rivalidad potenciará los deportes de invierno en el territorio.

--Además con acuerdos con el Gobierno central para realizar inversiones, tendrán que esperar a saber cuál es la ganadora.

--Está claro. Y es una pena. Es un tiempo que vamos a perder. Si solo hubiese una candidatura, ya podríamos empezar a planificar las inversiones dependientes de Madrid. Vamos a perder dos años.

--¿Ha faltado coordinación para evitar esta duplicidad?

--No lo creo. Las ciudades son autónomas para presentarse. Agradezco que nadie haya intervenido en este sentido. Pero echo de menos generosidad por parte de Barcelona. Cuando optaron a las olimpiadas del 92 todos apoyamos ese proyecto. Ellos ya tuvieron sus juegos. Quizás hubiese entendido que se plantearán otro evento como el de hace 30 años, como han hecho otras ciudades, pero no uno invernal.

--La competencia también puede ser un revulsivo.

--A lo mejor. Esto acaba de empezar, pero la forma en la que ha entrado en escena Barcelona quizás nos ayude a ganar músculo, a conseguir más respaldo. La competencia hará que Aragón esté unido. Nosotros no hemos dejado de trabajar. Y así seguiremos. Pero ahora habrá más consenso. El proyecto se convertirá en una cosa de todos.

--Ganar a Barcelona se puede convertir en todo un objetivo de todos.

--Es el momento de estar unidos, eso está claro. A ver cómo responden el resto de partidos. Es hora de hacer política de alto nivel y trabajar mucho. Si todos vamos juntos es una brecha más que cerramos y un punto más a nuestro favor. Debemos creernos el proyecto como un objetivo para todos.

--¿Cree que ha faltado compromiso por parte de algunos partidos?

--Quizás. Veremos qué hacen ahora... quién se descuelga. Nuestro proyecto debe ser el mejor y también el de todos.

--¿Cuáles cree que son los puntos fuertes de Barcelona?

--Pues prefiero no decirlos. --¿Esto obliga a redoblar esfuerzos en la preparación del proyecto?

--El proyecto se va configurando poco a poco. Tenemos ya mucho trabajo hecho. No improvisamos nada. Estamos conformando el equipo técnico que es fundamental para ganar. Tenemos tiempo porque la decisión no se toma hasta el 2013-2014, pero no nos encontramos en situación de pausa, ni mucho menos.

--¿La entrada de Barcelona deja la puerta abierta a que se presenten más ciudades?

--Claro. Cabe la posibilidad de que haya más candidaturas. Las ciudades son libres para optar a los juegos.