Las cámaras de videovigilancia superan el millar y casi se duplican en un solo año en Aragón

La bienvenida por carretera en los pueblos aragoneses siempre la ha protagonizado un cartel con franjas de color blanco, rosa y verde en el que el nombre del municipio queda acompañado de los atractivos turísticos locales y de la demarcación comarcal a la que pertenecen. Pero esta imagen ha cambiado significativamente en muchos de ellos desde que, en diciembre de 2019, las localidades zaragozanas de Ricla y Los Fayos encabezaran el proyecto de instalación de cámaras de videovigilancia en Aragón. Y es que el citado sistema de seguridad ciudadana también exige la colocación de un cartel informativo sobre la existencia de los dispositivos, tal y como sucede a día de hoy en 71 municipios aragoneses para anunciar que están dotados con un total de 1.014 dispositivos. Se trata de un incremento del 76% en comparación con el año pasado –en mayo de 2023 , el recuento era de 575 cámaras– que no tiene visos de frenarse porque otros 45 municipios ya se encuentran en trámites para sumarse a la lista.

Instaladas cuatro nuevas cámaras de seguridad en El Gancho (Zaragoza)

Así se desprende de los datos que maneja la Delegación del Gobierno en Aragón a fecha de 31 de marzo de 2024 y que, por provincias, encabeza la zaragozana con 567 cámaras a la que sigue Huesca (330) y Teruel (117). En términos porcentuales, el mayor incremento se ha registrado en Teruel (+318%) al pasar de 28 a 117 cámaras e incorporar ocho nuevos municipios para hacer un total de 13, entre ellos, Aguatón, Albarracín, Alcaine, Alcañiz, Balón, Singra y Valjunquera.

La citada lista, precisamente, mantiene los 11 aparatos de Albalate del Arzobispo, repartidos en zonas públicas como el polígono industrial, el parking de las autocaravanas, la casa de la cultura y varios puntos de cierto interés patrimonial. Y está previsto que próximamente se sumen otras cámaras en la Casa Cuartel de la Guardia Civil, tal y como explica la alcaldesa de Albalate del Arzobispo, Celia Trullén, a EL PERIÓDICO DE ARAGÓN. «Son métodos efectivos y mantenemos una colaboración con la Guardia Civil para el visionado de las imágenes», asevera Trullén en alusión al aumento de «los niveles de delincuencia» como, por ejemplo, el reciente robo de un camión a una empresa constructora, pequeños hurtos en la comarca e incluso el robo de una grúa para luego estamparla contra la fábrica de cervezas Ámbar.

¿Por qué se instalan cámaras de videovigilancia en Aragón?: "No tenemos cuarteles de la Guardia Civil a muchos kilómetros a la redonda"

A estos municipios turolenses se sumarán próximamente otros diez que se encuentran en trámite junto a otros 5 en la provincia de Huesca y 30 en la provincia de Zaragoza. Es esta última demarcación la que cuenta con un mayor de cámaras a tenor de los 567 dispositivos instalados en 41 localidades, entre ellas, Cadrete (22), Calatayud (9), Caspe (39), Épila (14), La Almunia de Doña Godina (25), Mequinenza (8), Ricla (12), Zaragoza (28) y Zuera (52). Son 439 cámaras más que en mayo de 2023, un incremento del 145% al unirse municipios como Ardisa, Badules, Balconchán, Biel, Bordalba, Cabolafuente, Castilliscar, Clarés de Ribota, Contamina, Cubel, El Frago, La Puebla de Alfindén, Las Pedrosas, Los Fayos, Mequinenza, Monegrillo, Monterde, Moyuela, Paracuellos de Jiloca, Tarazona y Utebo.

Se trata de una tendencia al alza que se aprecia por igual en todas las provincias aragonesas y así lo atestiguan también los guarismos de Huesca con la instalación de 330 dispositivos repartidos entre 17 localidades a diferencia de los 245 aparatos de 2023. Entre todos los municipios destaca la propia capital oscense con 118 cámaras que le llevan a encabezar la lista a nivel regional y, a nivel provincial, le siguen pueblos como Altorricón (24), Barbastro (38), Binéfar (15), Fraga (29), Monzón (12) y Sabiñánigo (34). Algunos de ellos debutan en la lista, tal y como sucede también con Arén o Canfranc.

Casi 600 cámaras ya vigilan más de 30 pueblos en Aragón

El incremento no es ninguna sorpresa porque, ya en mayo de 2023, un total de 636 cámaras estaban en disposición de instalarse al haberse iniciado ya los correspondientes trámites ante la Administración competente. La comparación todavía cobra más fuerza si se toman como referencia los datos de principios de 2022, cuando solo 25 municipios se habían adherido al sistema de videovigilancia con un total de 442 dispositivos.

Cámaras de videovigilancia en Aragón: El ojo que todo lo ve

Se da la circunstancia de que el fenómeno se ha disparado en un periodo de tiempo en el que el medio rural aragonés clama contra la falta de guardias civiles al denunciar algunas asociaciones del Instituto Armado una merma superior al medio millar de agentes. Ante esta situación, los ayuntamientos han impulsado el citado sistema de seguridad como una forma de disuasión y de prevención para luego facilitar a la Guardia Civil la investigación de, en su mayoría, hurtos y robos que con cierta frecuencia se suceden en los pueblos. A ello aluden también los policías locales que, de hecho, se reunieron hace un mes en Cuarte de Huerva para abordar ciertas cuestiones y, entre ellas, recalcaron «el detrimento» de la seguridad. Sobre ellos recae la competencia de las grabaciones obtenidas con las cámaras.