La magistrada encargada de juzgar la propiedad del arte sacro en disputa entre los obispados de Lérida y Barbastro-Monzón ha vuelto a desestimar como prueba las actas notariales de la diócesis leridana que recogen las cuentas de las compras que hizo el obispo José Meseguer, fundador del Museo de Lleida. Son 40 kilos de actas que el Obispado de Lleida tradujo al latín para que la Iglesia reconsiderara su decisión de trasladar del Museo de Lleida a Barbastro las piezas originarias de las iglesias aragonesas que hasta 1995 pertenecieron a la diócesis leridana. Las autoridades eclesiásticas nunca tuvieron en cuenta esta documentación que también solicitó la Asociación de Amigos del Museo, la entidad que presentó la demanda con la intención de demostrar que Lérida era propietaria por la usucapión, la posesión pacífica durante un tiempo sin existencia de documentos. En la vista previa, celebrada en enero, el abogado de asociación, Francesc Sapena, pidió a la magistrada que las solicitara a la notaría con acta judicial, pero la jueza rechazó la propuesta y consideró que tenía que haber tramitado la petición la asociación.