"No nos habían dicho nada, es una sorpresa desagradable", expresan desde el sindicato CSI-F. "El cambio provoca más incertidumbre y no beneficia al proceso. No sabemos a cuántos puede afectar, todo depende de si hay oposiciones o no", recalcan. Desde la organización se considera un "desprecio" a los opositores y a los sindicatos, al no consultar ni comunicar el cambio.