Los alumnos de la Facultad de Educación llevan tiempo implicándose en la reivindicación de su nuevo edificio, cuyas obras están paralizadas por falta de financiación a apenas dos meses de su conclusión. Tras numerosas movilizaciones en la calle, ahora los estudiantes meditan llevar su queja a las Cortes de Aragón, donde solicitarían una comparecencia para exponer su problemática. "Seguimos luchando porque la esperanza no se pierde y estamos pensando acudir a las Cortes para argumentar nuestro problema porque parece que en la calle no se nos escucha", indicó la portavoz Laura Falo.

Ayer, la enésima protesta llevó a todos los integrantes de la facultad --estudiantes, profesores y resto de personal-- a la plaza San Francisco, donde celebraron parte de sus clases para exponer que "esto será lo que pase todos los días el próximo curso, cuando se incorporen 360 alumnos más y no haya donde ubicarlos", advirtió el decano, Enrique García.

La esperanza es que, antes de fin de año, se incluya en los presupuestos de la comunidad autónoma para el 2013 una partida que permita reanudar los trabajos. "Estamos hablando de 5 millones que nos obligan a salir a la calle para dar clases", explicó Falo, que expone los "numerosos" problemas que sufren los estudiantes en la actual facultad, en la calle San Juan Bosco, por la falta de espacio. "Estamos repartidos en ocho edificios, con todo lo que eso supone, no tenemos biblioteca sino únicamente una sala de lectura en la que apenas caben treinta personas y los libros están en el pasillo, donde también nos han habilitado ocho mesas para poder hacer trabajos y no hay espacio para tutorías".

Desde el decanato no se tira la toallaa pesar de que su enésimo intento, pedir ayuda a los millonarios que figuran en la lista Forbes, también se ha saldado sin éxito. Ahora, el decano ha remitido sendas cartas a la presidenta del Gobierno aragonés, Luisa Fernanda Rudi, y al Justicia de Aragón "para que se pasen y vean en qué situación indigna e insostenible estamos".