La situación de los funcionarios que se encargan de examinar a los aspirantes a obtener el carnet de conducir ya fue noticia en mayo de este año, pero por otros motivos. La asociación que agrupa a este colectivo denunció la creciente tensión que se vive en las pruebas, a las que los examinandos llegan atenazados por la situación económica, el riesgo de fallar y, en consecuencia, el de tener que pagar de nuevo las tasas oficiales. A ello se une el hecho de que, en virtud de los últimos cambios introducidos por la DGT, son los funcionarios los que deben comunicar al alumno el resultado del examen.