El presidente del Consorcio de Transportes de Zaragoza (CTAZ) y consejero de Obras Públicas de la DGA, Rafael Fernández de Alarcón, conocerá de primera mano el respaldo que los ayuntamientos dan a las cuentas para el 2015 en un presupuesto para el que les ha pedido a los 30 municipios que dupliquen su aportación. En el documento que hoy se vota hay hasta tres opciones, contando con la decisión que adopte el Ayuntamiento de Zaragoza, que ayer ya aseguró que no dará "ni un euro más" mientras el Gobierno aragonés "siga sin pagar los 24 millones de euros que debe por el tranvía" de la capital.

Lo que no cambiará es la aportación de la DGA, que pondrá este año "800.000 euros", 140.000 más que en el 2014. Así que las únicas opciones que quedan es que el resto de localidades acepten poner el doble, sumar --con Zaragoza incluida-- 451.760,02 euros y dejar el presupuesto en 2,07 millones de euros (el año pasado fueron 1,75) o que se nieguen y se quede en 1,94.

Pero el rifirrafe está servido entre Zaragoza y Alarcón. En la última reunión se llegó a acusar al ayuntamiento de no pagar los 350.000 euros del 2014, amenazando incluso con acudir a un crédito bancario (obligando al resto de municipios a tener que pagar intereses). Y ayer el vicealcalde Fernando Gimeno advirtió al consejero de que "no tiene nada que exigir mientras él no pague lo que debe por el tranvía". La DGA descartó el crédito porque ya ha cobrado, pero le recordó que "adeuda 602.000 euros del 2011 y 2013".