Aragón comenzará, el próximo mes de septiembre, a vacunar a los niños que, a finales del 2015, no recibieron la dosis de recuerdo contra la tosferina, el tétanos y la difteria. Entonces, los problemas de suministro llevaron a la consejería a priorizar la vacunación de mujeres embarazadas en el último trimestre de gestación para asegurar la protección del bebé, que no recibe la primera dosis de esta vacuna hasta los 2 meses.

Ahora, una vez restablecidas esas dificultades que limitaban las existencias de estos antídotos, Sanidad ya ha dado orden para que los niños nacidos en el 2010 —la única cohorte que resta por recuperar esa dosis de recuerdo después de que ya la recibieran los del 2011— lo hagan a partir de la segunda quincena del próximo mes.

Las autoridades sanitarias notificarán esta disponibilidad a las familias a través de una carta informativa en la que se les indicará las instrucciones pertinentes para que sus hijos sean vacunados y emplazarán a los padres a pedir cita.

Se estima que entre 12.000 y 13.000 niños están llamados a recibir esta dosis.

En todo caso, Salud Pública ya ha dejado claro en numerosas ocasiones que la demora en la administración de esta vacuna no tiene consecuencias en la salud de estos niños pendientes de recibirla y que la tosferina es una patología grave en lactantes.

Por eso, cuando el suministro redujo las existencias, Aragón y otras comunidades optaron por destinar las vacunas disponibles a las embarazadas, que respondieron en gran medida. De hecho, la cobertura se situó por encima del 90%, con más de 10.0000 mujeres vacunadas para proteger a sus bebés.

Se estima que la vacuna contra la tosferina ha podido reducir hasta un 65% la incidencia de la enfermedad en lactantes.