Zaragoza cuenta desde ayer con otro comedor escolar autogestionado por los padres. Se trata del que inauguró el colegio público Agustina de Aragón, en el barrio del Actur.
Para la celebración, a la que acudió el presidente del distrito, Pablo Hijar, y la concejala de Educación del Ayuntamiento de Zaragoza, Arantzazu Gracia, las familias organizaron una degustar de algunos de los platos que se incluirán en el menú que se ofrecerá a los escolares durante el curso que comienza mañana.
Se trata de un nuevo servicio que se pone en marcha y que ha sido gestinado por el AMPA del colegio público, con el objetivo de ofrecer a los alumnos del centro escolar "una cocina propia, elaborada con los excelentes productos y alimentos locales, y mejorar la calidad de la comida".
El presupuesto para la remodelación de las instalaciones y de la puesta en marcha de este nuevo servicio ha sido aportado por las madres y los padres de los escolares del centro (que cuenta con un total de 600 alumnos) a través de microcréditos. Todas las familias del centro escolar han participado en este proyecto, por lo que se ha podido recaudar los 20.000 euros necesarios para remodelar la cocina y poner en marcha el servicio.
El menú elegido para la inauguración fue arroz a la campesina, pollo asado y fruta, al que pudieron acceder las familias que se hubieran inscrito previamente en la web del centro. Los adultos abonaron cinco euros y los niños, tres.
El objetivo de esta jornada era, según indicaron desde el propio colegio, "agradecer a toda la comunidad educativa, en especial a las familias, su colaboración en este gran proyecto liderado por la asociación de padres, que a partir de este curso autogestionará el servicio de comedor, ofreciendo a los alumnos una comida de calidad, cocinada en el propio centro y con materias primas procedentes de proveedores de cercanía".
La "estrecha colaboración" entre el equipo directivo y la AMPA, así como la aportación de las familias en forma de microcréditos ha permitido, tras muchas semanas de trabajo, alcanzar este objetivo "deseado por la inmensa mayoría", resaltaron los padres.
La nueva cocina in situ se une, así, a las ya creadas en Zaragoza y el servicio de autogestión se añade al que ya se lleva a cabo en otros centros de la capital, como el Doctor Azúa, Cesáreo Alierta, César Augusto, Eliseo Godoy, Tío Jorge y San Braulio.
Además, el Departamento de Educación se ha comprometido a que los colegios de nueva creación cuenten con cocina propia, que podrá ser gestionada por la dirección del centro y los padres. En los centros donde no haya cocina, la dirección podrá solicitarla siempre que haya disposición de espacio y disponibilidad presupuestaria.
