Como ya adelantó este diario, la liquidación del azud de Vadorrey que permite laminar el Ebro y de este modo la navegabilidad del río, ya está en la Junta de Arbitraje. La constructora (que es la misma que la de la Escuela de Artes) reclama tres millones de euros más a Expoagua porque considera que las obras sufrieron demoras que les provocaron perjuicios económicos por causas ajenas a ella.