Los servicios sociales de base atendieron durante el año 2015 a 142.961 usuarios frente a los 110.658 del 2009, según datos del Gobierno de Aragón que registraron asimismo una disminución de la atención a domicilio y también de la asistencia a domicilio en el mismo periodo.

Una importante parte del trabajo se centró en la prevención e inserción social, con un total de 27.820 personas atendidas en el 2015. De ellos, más de 10.000 fueron inmigrantes.

En cuanto a las ayudas de urgencia, se concedieron 2.990, y 3.369 de ellas supusieron un gasto global de 678.000 euros.

En opinión de los técnicos de la DGA, “puede afirmarse que las comarcas tienen una especial dedicación a materias relacionadas con las políticas sociales». De esta forma, a nivel presupuestario se destinan porcentajes que van desde cerca del 20% a más del 50%.

Esta diferencia, que lo es solo en apariencia, se debe a la fórmula de gestión de cada una de ellas, que puede ser directa o a través de los ayuntamientos, así como a la existencia de residencias para personas muy mayores.

En cualquier caso, la media dedicada a políticas sociales alcanza aproximadamente el 30%.

Se trata de una cifra que refleja la dedicación y vocación volcada en lo social de los entes comarcales de Aragón, concebidos como escalón más inmediato para hacer frente a las necesidades de los habitantes del territorio. H