Los personajes del exitoso espectáculo infantil los ComiClowns, con el policía Escabeche a la cabeza, saltan del escenario a las viñetas, en un cómic mudo que relata una divertida aventura con imágenes a todo color y sin ningún diálogo dentro de los clásicos bocadillos de los tebeos.

Los dibujos del ilustrador aragonés Antonio Moratha son suficientes para que el pequeño lector siga una historia de acción y de humor que divierte a los más pequeños y que rinde homenaje a los clásicos del cine mudo.

Editado por la editorial Cornoque de la Asociación Cultural Malavida, este cómic surge del espectáculo participativo de música en directo, títeres y clown 'Los ComiClowns', de Roberto Malo y los Hermanos Carcoma, Jesús Mesa y Daniel Tejero.

Después de la buena acogida del show los tres artistas decidieron trasladarlo a las viñetas manteniendo los cuatro personajes que guían la historia: dos artistas callejeros y una violinista, que forjan una bonita amistad y que topan con un policía gruñón y malhumorado, llamado Escabeche, que está empeñado en echarles el guante.

De alguna forma este personaje es el que, al perseguirlos, crea esas escenas típicas del cine mudo manteniendo la acción y el humor que atraviesa a todo el guión, ha explicado a EFE Roberto Malo, quien, junto a los Hermanos Carcoma y Moratha, han presentado este cómic en una librería de la capital aragonesa disfrazados de los protagonistas.

Son 64 páginas a todo color, con dos viñetas apaisadas en cada una de ellas, sin diálogos y sin apenas texto, tan solo algunas onomatopeyas, ha indicado Malo.

La idea fue del dibujante Moratha, quien sugirió eliminar los diálogos al entender que la historia podía seguirse sólo con las imágenes.

"Se lo comenté a ellos -en referencia a los guionistas- y como estos Comiclowns son así me dijeron que sí a todo", ha comentado a EFE.

La realidad es que son escenas "muy visuales" que no necesitan el apoyo de los diálogos porque se ve claramente lo que ocurre en la historia, ha comentado al respecto Roberto Malo.

Además de esta forma, ha añadido, se convierte en un tebeo para todos los públicos, también para los niños que todavía no saben leer o que están aprendiendo.

Por su parte, el ilustrador, encantado por no tener que ceñirse al espacio dejado por los bocadillos de texto, se las ha ingeniado para transmitir los pensamientos de los personajes con más dibujos.

"Por ejemplo, en un bocadillo de uno de los artistas aparece el policía con orejas de cerdo para transmitir que ese personaje se estaba enfadando con él", ha precisado.

Es decir, en los pocos bocadillos que hay a lo largo del cómic aparecen más dibujos, ha aclarado este ilustrador, que se ha inspirado en los propios actores para hacer sus personajes.

El cómic 'Los Comiclowns', que lleva el mismo nombre que el espectáculo, salió a la venta a finales de mayo y, desde entonces, las opiniones de los primeros lectores han sido muy buenas, ha indicado Roberto Malo.

"Está gustando mucho, a los chavales les llama la atención el colorido que tiene. Moratha es un crack para esto y está funcionando muy bien porque la historia es sencilla y está muy bien dibujada".

'Los ComiClowns' es la segunda entrega de Papafrita, una colección que se inauguró con 'Martina y Marcial, pareja espacial', y que busca adaptar el espíritu desenfadado de los cómics de Malavida para niños a partir de 4 años.

Mientras que para Daniel Tejero y Jesús Mesa ésta es su primera incursión en el noveno arte, Roberto Malo y Moratha son veteranos. Entre sus obras, figura 'Los guionistas', un cómic para público adulto.