El Ayuntamiento de Zaragoza ha ordenado abrir una investigación interna para determinar las circunstancias que rodearon la muerte de un perro que fue abatido de un disparo por un agente de la Policía Local el pasado viernes por la tarde en Delicias. "Se abre un expediente informativo siempre que se utiliza un arma de fuego", precisó ayer una fuente municipal que insistió en que el animal, "un mastín de más de 50 kilos", había atacado previamente a cuatro personas.

El dueño del perro, que hoy presentará una denuncia por considerar que la actuación policial fue "desproporcionada", sostiene que Lucky no es un ejemplar agresivo, pero que se puso nervioso al ver que los agentes lo cercaban con sillas para atraparlo, tras haberse escapado. Asimismo, asegura que su progenitor, que llevaba al perro de paseo, no estaba bebido, como figura en la versión oficial, sino que padece una enfermedad.

El caso de Lucky, que según testigos presenciales pesa algo más de 30 kilos y es un pastor de aguas, causó una gran indignación en el barrio de Delicias y ha invadido las redes sociales. Varias organizaciones de defensa de los animales también anunciaron ayer su intención de denunciar la actuación de los agentes del 092.

El ayuntamiento mantiene que los policías siguieron el procedimiento establecido para estas situaciones, pero dos partidos políticos, Chunta Aragonesista e Izquierda Unida, emitieron sendos comunicados en los que piden que se explique lo sucedido y se depuren responsabilidades "si es necesario".